Por encima de la lluvia

25 minutos

En este capítulo, se narra la historia de Thelma, quien se encuentra en Tánger después de la partida de su esposo Enrique. A pesar de su ausencia, las pertenencias de Enrique aún están presentes en la habitación, lo que dificulta que Thelma acepte su partida definitiva. Thelma se aferra a las rutinas diarias y se sumerge en la enfermedad del recuerdo, recordando momentos pasados con Enrique.

Thelma se encuentra en un estado de desesperación y dolor, buscando consuelo en el alcohol. A pesar de que el alcohol ya no la ayuda a olvidar, le permite amortiguar el dolor. Thelma se sumerge en la rutina de abandono y se aferra a las pertenencias de Enrique como una forma de mantenerlo cerca.

La narración también nos muestra los recuerdos de Thelma sobre su vida en Tánger. Recuerda los paseos por la medina con Enrique, su vida social y la belleza de la ciudad. Sin embargo, Tánger ha cambiado y se ha vuelto peligrosa debido a la religión, el nacionalismo y la política. Todos sus amigos se están marchando y Thelma también debe irse, ya que no es seguro para ella y su hija quedarse en Tánger.

Thelma recibe una oferta de su padre para regresar a Londres, pero ella se niega, ya que siente que el mundo al que pertenecía ya no existe. Thelma decide tomar una decisión drástica y sube a su ático, donde ha estado trabajando en una pintura. Es su obra maestra, un retrato de un joven moro. Thelma siente que esta pintura es una forma de exorcizar sus sentimientos y decide destruirla, pero se detiene cuando se da cuenta de que no puede hacerlo sola.

Thelma baja y se dirige a la habitación de su hija Helena. Thelma está decidida a poner fin a su vida, pero no quiere dejarle a Enrique la última victoria. Thelma lleva a Helena a la playa y la arrastra al mar, intentando ahogarla. Helena lucha por su vida y logra escapar, mientras Thelma continúa nadando hacia el mar abierto.

Helena se queda en la playa, esperando el regreso de su madre y aferrándose a la esperanza de que su padre también regrese. La historia termina con Helena esperando en la playa, recordando los momentos felices que solía tener con su familia.

Primera parte Febrero de 2014

1

En este capítulo, Miguel comienza su día como de costumbre, despertándose a las seis de la mañana con la misma melodía de Domenico Scarlatti. Realiza su rutina de higiene personal con meticulosidad y cuidado, y se dedica a arreglar su característico bigote. A los setenta y cinco años, su bigote sigue siendo su carta de presentación y representa su orden y seriedad.

Después de arreglarse, Miguel realiza las tareas domésticas de la casa y se dedica a cuidar de un arcón de madera que guarda en una habitación cerrada con llave. Esta habitación nunca tuvo una verdadera utilidad hasta la muerte de su esposa Águeda, y desde entonces se ha convertido en su lugar de silencio.

Miguel sale de casa para reunirse con sus antiguos compañeros del banco en un bar. Sin embargo, se siente disperso y desconectado durante la reunión. De repente, se siente desorientado y no reconoce las calles a su alrededor. Se da cuenta de que algo no va bien y comienza a sentir un hormigueo en la cara. Luego, se desmaya y cae al suelo.

Después de ser llevado al hospital y someterse a pruebas, Miguel recibe el diagnóstico de demencia senil, específicamente Alzheimer. Este diagnóstico lo deja aturdido y asustado. El médico le explica que el deterioro neuronal es irreversible, pero existen tratamientos paliativos para controlar los síntomas.

De regreso a casa, Miguel decide leer las cartas de Carmen, una mujer con la que tuvo una aventura hace años. Las cartas evocan recuerdos y emociones en Miguel, y se da cuenta de que su vida está cambiando drásticamente debido a su enfermedad.

Miguel se enfrenta a la realidad de su diagnóstico y se siente abrumado por la idea de una muerte lenta y prolongada. A pesar de su deseo de rendirse, decide luchar y buscar tratamientos paliativos para hacer frente a su enfermedad. Termina el capítulo leyendo una carta de Carmen y reflexionando sobre la posibilidad de ser feliz a pesar de su situación.

2

En este capítulo, se nos presenta a Helena, una mujer que heredó el insomnio de su madre y la facilidad para esconderse detrás de la ginebra. A pesar de haber crecido creyéndose la más desgraciada, Helena fue criada por su abuelo Whitman después de la muerte de su madre y se convirtió en una niña consentida por su abuela Alice. Aunque Alice sentía amor por Helena, también la culpaba por la muerte de su hija Thelma. A pesar de esto, Helena encuentra alivio cuando es internada en un colegio para señoritas de la alta sociedad en las afueras de Londres. Allí conoce a su amiga inseparable Louise y empieza a desvanecerse su infancia. Helena se convierte en una mezcla de las personalidades de Louise y ella misma, pero con el tiempo todas estas versiones de Helena desaparecen y se convierte en una mujer sarcástica y vacía al cumplir los setenta años. En su cumpleaños, Helena recibe un bizcocho y una postal de felicitación, pero se siente decepcionada por los regalos. Luego, el profesor Marqués, un hombre pequeño y deforme, visita a Helena en su habitación y le muestra una composición musical que ha escrito para ella. Helena se emociona al escucharlo tocar el piano imaginario. Después de la visita de Marqués, Helena se encuentra con el profesor de informática y tienen una videollamada con su hijo David, quien le cuenta sobre su vida en Suecia. Helena se siente triste y sola después de la llamada y se sienta en un banco del claustro, recordando momentos de soledad en su vida.

3

En este capítulo, se describe el encuentro entre el subcomisario Gövan y Yasmina en el estacionamiento cerca del puente de Öresund. Aunque Gövan se siente feliz de estar con Yasmina, ella se siente incómoda y no logra disfrutar del momento debido a la prisa y la incomodidad del lugar. Discuten sobre la situación complicada de Gövan, quien está casado y tiene una familia, y no puede comprometerse completamente con Yasmina. Después de vestirse, regresan a la ciudad y Gövan le pregunta a Yasmina si ha dejado alguna evidencia de su encuentro. Luego, discuten sobre el caso de un traficante pakistaní que ha sido encontrado muerto en el puerto, del cual Gövan está a cargo. Yasmina le pregunta sobre las drogas encontradas cerca del cadáver, pero Gövan se niega a hablar de su trabajo. Después de despedirse, Yasmina regresa a su barrio, Rosengard, y se encuentra con Sture, el dueño del restaurante Vieja Suecia. Sture le habla sobre la deuda que su abuelo contrajo con él y le pide que averigüe más sobre el caso del puerto a través de Gövan. Yasmina luego regresa a casa y cuida de su abuelo, quien está en un estado lamentable. Mientras tanto, Abdul, el abuelo de Yasmina, reflexiona sobre su pasado y se siente avergonzado de su situación actual. Finalmente, Yasmina observa su habitación y se siente desanimada por su vida en Rosengard.

4

En este capítulo, Natalia se encuentra enferma y vomita en el baño mientras recuerda los vómitos de su juventud. Luego, se mira en el espejo y observa un dibujo de un arlequín que hizo de niña. Después de limpiarse, regresa a la habitación donde encuentra a Gustavo, su pareja, tumbado en la cama. Tienen una conversación sobre el trabajo de Natalia y sobre la posibilidad de que ella escriba sus propias historias en lugar de corregir las de otros. Gustavo muestra su desprecio hacia el talento de Natalia y ella se siente frustrada. Luego, hablan sobre el padre de Natalia y la posibilidad de que viva con ellos debido a su enfermedad. Gustavo sugiere contratar una enfermera, pero Natalia propone que su padre viva con ellos. Gustavo se muestra sorprendido y Natalia se siente fuerte al tomar esa decisión. Después, se muestra la vida de Miguel, el padre de Natalia, y cómo Natalia se ocupa de él y de su enfermedad. Miguel se muda a vivir con Natalia y se siente incómodo en su nuevo hogar. Tienen discusiones sobre la vida de Miguel y su relación con Carmen, una mujer del pasado. Miguel se siente avergonzado por su enfermedad y Natalia le pide que se mude a una residencia. Luego, Miguel se encuentra con Gustavo, quien le informa que ha vuelto con Natalia y que están esperando un bebé. Miguel se enfurece y amenaza con alejarse de su hija. Natalia y Miguel discuten sobre la decisión de Natalia de volver con Gustavo y Miguel le dice que se marchará. Natalia le pide que se vaya y Miguel se siente destrozado. Más tarde, Miguel tiene un sueño en el que ve a su madre y se despierta con miedo. Decide escribir el nombre de su padre en la urna con las cenizas de su madre y luego ve la sombra de un hombre joven en la habitación. Miguel se da cuenta de que tendrá que aprender a vivir con sus fantasmas y decide marcharse.

Segunda parte Marzo de 2014

5

En este capítulo, la directora Roldán sufre de migraña y se encierra en su despacho para aliviar el dolor. A pesar de las preocupaciones que conlleva dirigir la residencia, Roldán se siente comprometida con su responsabilidad y no quiere decepcionar a los accionistas. Para relajarse, practica una técnica de meditación frente a un cuadro de una marina en su despacho.

Sin embargo, esa mañana Roldán se siente incómoda por algo más que el dolor de cabeza. Observa su despacho vacío y se da cuenta de que no tiene ningún detalle personal ni afecto en su vida. En ese momento, recibe una llamada urgente del responsable del personal informándole de un problema grave en la capilla con el profesor Marqués.

El profesor Marqués es un experto en órganos y se ha retirado en la residencia para cuidar del órgano tubular del siglo XVIII que es uno de los mayores tesoros del lugar. Sin embargo, Marqués está frustrado porque una mujer a la que Roldán le ha confiado el cuidado del órgano lo está maltratando y tocando mal. En un ataque de ira durante la misa, Marqués ataca a la mujer y se atrinchera en la capilla.

Roldán intenta mediar con Marqués durante veinte minutos, pero él se muestra inflexible y culpa a Roldán de todo. Finalmente, Roldán decide llamar a la señora Scott, quien sabe cómo manejar a Marqués. Mientras tanto, llega un nuevo paciente a la residencia, Miguel, quien se despide de su hija y llega con sentimientos de tristeza y derrota.

La directora Roldán le muestra a Miguel las instalaciones de la residencia, incluyendo la capilla donde se encuentra el órgano. Miguel se muestra desinteresado en el arte y la arquitectura, y solo quiere descansar en su habitación. Una vez solo en su habitación, Miguel coloca la urna con las cenizas de su madre y se encuentra con la presencia de un joven llamado Amador, quien resulta ser su padre fallecido.

Miguel duda de la realidad de la presencia de Amador, pero este le confirma que siempre ha estado a su lado. Ambos tienen una conversación sobre el pasado y los sentimientos de Miguel hacia su padre ausente. Al final, Miguel reflexiona sobre la muerte y le pregunta a Amador si duele estar muerto, a lo que Amador responde que solo le duele pensar en los vivos.

En este capítulo, se exploran los conflictos personales de la directora Roldán y la llegada de Miguel a la residencia, así como el encuentro entre Miguel y su padre fallecido.

6

En este capítulo, Helena se dirige al despacho de la directora Roldán mientras recuerda a su amiga Louise y su actitud misteriosa. Helena recuerda cómo Louise la introdujo en el internado de Mayfield y cómo ella se sentía inferior a su amiga. Al llegar al despacho de la directora, Helena intuye que la han citado por el incidente de Marqués en la capilla. La directora le reprocha a Helena que no ha logrado controlar a Marqués y le propone trasladarlo a un hospital psiquiátrico. Helena se niega a convencer a Marqués y se enfrenta a la directora, defendiendo la autonomía de los residentes. Después de la discusión, Helena se encuentra con Miguel en el comedor y tienen una conversación sobre el pasado y la importancia de vivir el presente. Helena revela que su madre se suicidó y que su padre la abandonó, mientras que Miguel confiesa que tuvo una aventura en el pasado. A pesar de la conexión que sienten, Helena y Miguel tienen un desacuerdo y regresan a la residencia en silencio. Al llegar, Helena descubre que Marqués ha sido trasladado al hospital y se preocupa por su amigo.

7

En este capítulo, Raquel pasa la mañana cocinando platos típicos de su tierra para agasajar al recién llegado, mientras Sture y su acompañante se sientan a la mesa a beber y fumar. Raquel intuye que la visita del desconocido está relacionada con la redada en el puerto y la muerte de un hombre degollado. Sture está asustado y Raquel intenta averiguar lo que está pasando, pero él la aparta y le dice que se ocupa de todo. Raquel sospecha que el desconocido ha sido enviado para presionar y amenazar a Sture. Por otro lado, Yasmina recuerda su infancia y la promesa que le hizo a su padre de ser famosa. Yasmina baila y canta en su habitación, pero es interrumpida por su abuelo, quien la critica y la insulta. Yasmina se viste y se prepara para encontrarse con el recién llegado en un hotel. El hombre la trata de manera despectiva y la obliga a tener relaciones sexuales con él. Después, Yasmina se viste y recoge los botones de su vestido. Sture se encuentra con el recién llegado en un callejón y se enfrentan en un duelo. Sture golpea al hombre hasta matarlo y se ensucia de sangre.

8

En este capítulo, el profesor Marqués acude a una entrevista en el hospital psiquiátrico de Málaga. Durante la entrevista, el doctor realiza preguntas y ejercicios para evaluar su situación. Marqués, de manera sarcástica, analiza al doctor y hace suposiciones sobre su vida personal. A pesar de la actitud despectiva de Marqués, el doctor continúa con la evaluación y le informa que tiene cirrosis hepática en el último estadio. Marqués expresa su desprecio por los trasplantes de órganos y plantea la posibilidad de disfrutar sus últimas horas, días o semanas sin tratamiento. El doctor no logra convencer a Marqués y la reunión termina. Dos días después, Marqués escapa del hospital psiquiátrico sin que nadie se dé cuenta. Luego, Marqués se dirige al conservatorio de música, donde toca el piano y recuerda su fracaso en las pruebas de acceso. A pesar de su emoción, Marqués se da cuenta de que sus habilidades han disminuido y se siente frustrado. Después de un breve encuentro con otro músico, Marqués sube a la azotea del edificio y se arroja al vacío, muriendo en el acto.

Tercera parte Abril de 2014

9

En este capítulo, se describe el velatorio de Marqués en el tanatorio municipal de Málaga. Aunque el cuerpo de Marqués no está visible, los empleados de la funeraria se esfuerzan en presentar el ataúd cerrado de la manera más presentable posible. Helena, la directora Roldán y Miguel son los únicos presentes en la sala, ya que no se pudo localizar a ningún familiar. En la carta de despedida de Marqués, declara a Helena como heredera universal y confiesa verdades que ella preferiría no saber. Miguel acompaña a Helena al notario para tratar los asuntos relacionados con la herencia de Marqués. Descubren que tanto Marqués como Helena están arruinados. Miguel se encarga de pagar los gastos del sepelio y le dice a Helena que no necesita devolverle el dinero. En el certificado de defunción de Marqués, se menciona la rotura de varias vértebras del cuello y el aplastamiento de la masa encefálica como causa de la muerte. En el cementerio, se sella el nicho de Marqués y Helena deja el diapasón de Marqués encima del féretro. Miguel se despierta en la residencia con recuerdos de su madre y reflexiona sobre su relación con Natalia, su hija. Decide llamarla y le pide que vaya a visitarlo el próximo domingo. Natalia acepta y le dice a Miguel que también lo quiere.

10

En este capítulo, se narra cómo la muerte de Marqués afecta a los residentes de la casa y cómo cada uno de ellos tiene anécdotas desagradables relacionadas con él. A pesar de esto, Marqués era considerado como el guardián de los límites de la residencia y su ausencia deja un vacío en todos. Helena, en particular, sufre su pérdida y se sumerge en un silencio desconcertante. Miguel intenta hablar con ella, pero Helena lo rechaza y prefiere pasar tiempo sola en el mirador. Miguel se siente culpable por su felicidad al recuperar a su hija y teme que Helena lo vea como un agravio. La directora Roldán le insta a hablar con Helena y hacerla reaccionar. Miguel encuentra a Helena en el mirador y le dice que no puede abandonarse de esa manera. Helena le cuenta sobre su infancia en Tánger y su amor por Abdul, el asistente de su padre. Recuerda un viaje al Rif con su padre y Abdul, y cómo se sintió feliz en aquel entonces. Helena también menciona que Abdul tenía una esposa y una hija, pero ella seguía enamorada de él. Miguel le sugiere que debería visitar Marruecos, pero Helena se niega, diciendo que la ciudad que recuerda ya no existe. Miguel le cuenta sobre las atrocidades cometidas por las tropas africanas durante la Guerra Civil, pero Helena no comprende esa sensación de odio. Helena se sumerge en la melancolía y decide emborracharse para olvidar su dolor, pero no lo consigue. Más tarde, Helena descubre que su padre nunca la olvidó y le enviaba postales cada año. También descubre que su abuelo ocultó las postales y culpaba a su padre por la muerte de su madre. Helena guarda un cuadro que su madre pintó de Abdul y lo considera responsable de su soledad. Helena se pregunta qué habrá sido de Abdul y si sabrá sobre la muerte de su madre. El capítulo termina con Helena recordando la última postal de su padre, en la que menciona haber encontrado a Abdul en Malmö y seguir su designio.

11

En este capítulo, se presenta a Gövan, un subcomisario de policía que se enfrenta a resolver un caso de asesinato en un parque infantil. Gövan se siente presionado por sus superiores y teme fracasar en la investigación. A pesar de su posición en la policía, Gövan nunca quiso ser policía y preferiría haber sido un campesino como sus antepasados. El cadáver encontrado en el parque es de un hombre decapitado y Gövan trabaja junto a la inspectora Inga para resolver el caso. Descubren que el cadáver lleva muerto dos semanas y que fue traído al parque desde otro lugar. Mientras investigan, Gövan reflexiona sobre su infancia en una granja y la felicidad que encontraba en la vida sencilla. A medida que avanza la investigación, Gövan se da cuenta de que la gente se siente segura y alejada de los horrores, pero la realidad es que el peligro puede estar más cerca de lo que creen. Gövan también recuerda su relación pasada con Inga y cómo todavía siente algo por ella. A medida que la investigación avanza, Gövan se enfrenta a la presión de resolver el caso y proteger a su familia. Mientras tanto, se revela que Abdul, un anciano, traicionó a su antiguo amante, Enrique, a las autoridades españolas. Abdul reflexiona sobre su relación con Enrique y cómo se sintió engañado por él. Aunque Abdul no se arrepiente de su traición, también se siente culpable por lo que hizo. Yasmina, la nieta de Abdul, escucha las noticias sobre el caso del cadáver decapitado y se siente angustiada por la situación. Sture, un amigo de Yasmina, le advierte que no hable con Gövan y que se mantenga firme. Yasmina considera saltar por la ventana, pero recibe un mensaje de Gövan que le pide que lo llame. Yasmina se debate entre saltar o hablar con Gövan.

12

En este capítulo, Gustavo se siente culpable y arrepentido después de golpear a Natalia. Se da cuenta de que su ira hacia ella es irracional y no entiende por qué no puede olvidarla a pesar de todo lo que ha pasado entre ellos. Gustavo se siente frustrado y confundido por sus sentimientos hacia Natalia y su relación con Miguel, el padre de Natalia, empeora aún más las cosas.

Mientras tanto, Miguel está preocupado por la ausencia de Natalia y trata de comunicarse con ella sin éxito. Se preocupa por su hija y teme que algo malo le haya sucedido. Miguel pasa la noche en vela, llamando a diferentes lugares en busca de información sobre Natalia, pero no obtiene respuestas.

Al día siguiente, Natalia finalmente responde al teléfono y le dice a Miguel que no pudo ir a visitarlo debido a un contratiempo. Sin embargo, Miguel sospecha que algo más está sucediendo y le pregunta si Gustavo la ha lastimado. La llamada se interrumpe cuando Gustavo toma el teléfono y le dice a Miguel que no vuelva a llamar ni a intentar ver a Natalia.

Mientras tanto, Helena está en el proceso de decidir si debe ir a Malmö para ver a su hijo David y su familia. Está llena de dudas y temores sobre cómo será recibida y si encajará en su vida. Helena se da cuenta de que su verdadera razón para ir a Malmö no es solo ver a su familia, sino escapar de su destino y vivir sus últimos días de la manera que ella elija.

Finalmente, Miguel encuentra a Helena en el jardín del claustro y le ofrece acompañarla en su viaje a Malmö. Helena acepta y deciden partir juntos. Antes de irse, Miguel se siente enfermo y necesita ir al baño, lo que retrasa su partida. A pesar de las miradas curiosas y los comentarios de los demás residentes, Helena y Miguel se van sin mirar atrás.

Deciden ir primero a Sevilla, ya que Miguel tiene algo que hacer allí. Helena acepta sin hacer preguntas y se prepara para el viaje.

Cuarta parte Mayo de 2014

13

En este capítulo, se nos presenta a Iván, un joven que se enorgullece de su cuerpo musculoso y de su dedicación al gimnasio y a las artes marciales. Iván tiene una relación especial con Guillermo, un hombre que lo entrena y lo golpea para endurecerlo. Iván también tiene una relación con Zona, una mujer a la que considera solo para los ganadores. A pesar de su aparente dureza, Iván tiene pesadillas sobre su hermano Pieter, quien lo maltrataba en Ucrania. Iván se siente atraído por la violencia y se ve a sí mismo como un gladiador moderno.

En otro lugar, Miguel regresa a su antigua casa, que ha puesto a la venta. Helena lo acompaña y observa una foto de Miguel con su esposa e hija. Miguel recuerda cómo su hija Natalia se rebeló contra él y su esposa Águeda, y cómo él la apoyó en su rebeldía. Miguel también recuerda cómo su hija se fue con Gustavo y cómo él se siente culpable por no haber podido hacerla feliz. Miguel y Helena se pierden en un lugar desconocido y desolado, y se encuentran con un grupo de jóvenes peligrosos. El capítulo termina con uno de los jóvenes hablando sobre el azar y mostrando una moneda de rublo.

14

En este capítulo, se narra la relación tormentosa entre Pieter e Iván, dos hermanos con personalidades opuestas. Pieter disfruta de hacerle daño a Iván a través de un juego cruel en el que elige cara o cruz, y dependiendo del resultado, le espera un maltrato físico o emocional. La madre de Iván, cegada por el amor hacia Pieter, no ve la maldad que este le hace a su hijo y piensa que Iván es el elegido de los dioses. A pesar de todo, Iván no odia a Pieter, sino que siente compasión por él.

Pieter regresa años después a Sevilla y quiere disfrutar de los frutos de su maldad. Iván, sin valor para enfrentarse a él, pide ayuda a Ramiro y al Gitano para que lo hagan sufrir. Después de dos años, Iván no sabe qué le hicieron a Pieter ni le importa. Lo único que conserva de él es una moneda de rublo que ahora exhibe ante dos ancianos que ha encontrado.

En otro lugar, Helena y Miguel tienen una discusión acalorada sobre la relación de Natalia con Gustavo, quien la maltrata física y emocionalmente. Miguel quiere ayudar a su hija, pero Natalia se muestra reacia a aceptar su ayuda. Miguel visita a Natalia en su trabajo y se encuentra con su rostro maltratado. Intenta convencerla de que deje a Gustavo, pero ella se muestra distante y no quiere hablar del tema.

Helena y Miguel tienen una conversación sincera en la que Miguel le cuenta su desesperación por no poder ayudar a su hija. Helena lo consuela y le muestra su apoyo. Ambos comparten el dolor de ver a sus hijos sufrir y se abrazan en busca de consuelo.

En resumen, este capítulo muestra la relación tóxica entre Pieter e Iván, el sufrimiento de Iván a manos de su hermano y la preocupación de Miguel por la situación de su hija Natalia. Helena se convierte en un apoyo para Miguel en su desesperación.

15

En este capítulo, Yasmina recibe la visita de Sture en su casa. Él la invita a dar un paseo y la observa mientras se viste. Sture le cuenta a Yasmina sobre su abuelo y cómo él lo ayudó en el pasado. Luego, Sture se burla de Abdul, el abuelo de Yasmina, y le pregunta sobre su muerte. Después, Sture lleva a Yasmina en coche y le cuenta sobre su relación con su madre y su hermano que murió. Yasmina se sorprende al enterarse de esto. Sture también le revela que él fue quien ayudó a su madre a tenerla a ella, ya que su abuelo quería que abortara. Luego, Sture muestra a Yasmina a su madre y le dice que debe hablar con su novio, el subcomisario Gövan, para que retire las pruebas en su contra. Sture le da una pistola a Yasmina y la amenaza para que cumpla con su petición. Yasmina se niega y Sture la ataca, pero finalmente la deja en la calle. Yasmina es ayudada por un hombre llamado David y ve a su madre entre la multitud, pero decide no llamar a la policía.

16

En este capítulo, Miguel acude a la comisaría para denunciar a Gustavo por las agresiones a su hija Natalia. Sin embargo, el joven policía le explica que necesitan pruebas más sólidas para intervenir de oficio. A pesar de esto, el policía promete enviar patrullas a la casa de Natalia para protegerla.

Mientras tanto, Helena recuerda el día de su boda con Walter y reflexiona sobre su matrimonio. Aunque nunca hubo violencia física, Helena se dio cuenta de que se había perdido a sí misma y se había sometido a las expectativas de su esposo. También recuerda la última conversación que tuvo con su padre, quien le pidió el retrato de Abdul, su amante, que su madre había pintado. Helena se negó a dárselo y su padre murió poco después.

Helena se encuentra con Iván, quien le ofrece ayudarla a deshacerse de Gustavo. Helena le entrega las llaves del coche de Miguel y su collar de perlas como pago. Iván se encarga de golpear a Gustavo y amenazarlo para que desaparezca de la vida de Natalia.

Miguel y Helena deciden contarle a Natalia sobre su plan para alejar a Gustavo. Sin embargo, Natalia reacciona con furia y acusa a su padre de ser un hipócrita y de arruinar su vida. Natalia decide cortar todo contacto con Miguel y lo considera muerto para ella.

Miguel regresa a casa devastado y Helena intenta consolarlo, asegurándole que Natalia eventualmente comprenderá su decisión. Miguel se siente culpable y lamenta que las últimas palabras de Natalia hacia él sean de odio. Helena lo anima a seguir adelante y a no quedarse atrapado en sus fracasos.

Quinta parte Junio de 2014

17

En este capítulo, Simón recuerda su época como guardia de presos en el Valle de los Caídos y su relación con el Arcángel, su superior. Simón describe el despacho del Arcángel, con un gran mapa de Europa en la pared y planos de la construcción de la basílica. El Arcángel se muestra como un militar educado y culto, pero sin afecto por los presos. Simón recuerda cómo el Arcángel lo invitaba a su despacho y le hablaba de la guerra, tratando de justificar sus acciones. El Arcángel le muestra a Simón su estampa del arcángel Miguel y le dice que su lógica no es el odio, sino cumplir con su misión. Simón le cuenta a su nieto Raúl sobre la guerra y cómo en la guerra los límites se desvanecen y se justifican las atrocidades. El Arcángel le reprocha a Simón que tiene las manos manchadas de sangre y lo amenaza con un juicio militar. Simón recuerda cómo el Arcángel lo obligaba a vigilar a los presos y cómo se sentía atrapado en aquel lugar. Luego, el capítulo cambia de narrador y se centra en Miguel y Helena, quienes están en un autobús rumbo a Madrid. Miguel recuerda la carta que su madre guardaba y decide ir a Madrid para buscar al autor de la carta. Helena le dice a Miguel que deben seguir adelante y no quedarse atrapados en el pasado. En una parada en una cafetería, Helena lee la mano de Miguel y le dice que él es de los que se elevan. Luego, ven en las noticias un accidente en el que mueren tres jóvenes delincuentes. Miguel se siente impactado por las imágenes y decide seguir adelante con su viaje a Madrid.

18

En este capítulo, Yasmina se encuentra con Gövan en un bar de Malmö. Aunque está molesta por la tardanza de Gövan, su enfado desaparece cuando él finalmente llega. Gövan le propone ir a su casa en el lago Vättem, ya que su esposa e hijos están fuera de la ciudad. Yasmina se niega, ya que tiene que cuidar a su abuelo. Sin embargo, Gövan insiste y finalmente convence a Yasmina de ir con él.

En el camino hacia la casa de Gövan, Yasmina reflexiona sobre su relación con él y sobre su propia vida. Llegan a la cabaña y pasan la noche juntos, entregándose a la pasión. A pesar de sus sentimientos por Gövan, Yasmina se siente culpable y confundida.

A la mañana siguiente, Yasmina descubre que Gövan ha encontrado información sobre Sture y su relación con los asesinatos. Gövan confronta a Yasmina y le muestra las pruebas incriminatorias. Yasmina se siente atrapada y teme por su vida. Sin embargo, Gövan decide no detenerla y le dice que se vaya.

Después de dejar la cabaña, Yasmina reflexiona sobre su pasado y su relación con Sture. Luego, decide buscar pruebas en el ordenador de Gövan y descubre información sobre los asesinatos. Aunque se siente culpable, Yasmina decide enfrentar a Sture y buscar una manera de escapar de su control.

Finalmente, Yasmina y Gövan regresan a la ciudad. Aunque Yasmina teme por su vida y la de su familia, decide enfrentar a Sture y buscar una manera de liberarse de su influencia.

19

En este capítulo, Miguel llega a una antigua finca en Madrid donde vive Simón Andújar, un hombre mayor en silla de ruedas. Miguel no tiene muchas esperanzas de encontrar a Simón con vida, pero para su sorpresa, una voz femenina le confirma que Simón está en casa y lo invita a subir. Simón se muestra inquieto en su silla de ruedas y recibe la ayuda de su hija mayor para aplicarse una crema cicatrizante. Simón no se siente con fuerzas para levantarse y solo quiere quedarse sentado frente a un almanaque en la pared. Miguel le muestra una carta que Simón escribió a su madre y le pregunta por qué la escribió. Simón recuerda a Miguel cuando era niño y le cuenta que Amador, el padre de Miguel, era un hombre hermoso y valiente. Amador escribía en un cuadernillo sobre la guerra y la libertad. Simón revela que el Arcángel, un oficial del Valle de los Caídos, lo utilizó para matar a Amador. Simón confiesa que mató a Amador para evitar que el Arcángel lo hiciera y que todavía se siente atormentado por ello. Miguel sale de la casa y reflexiona sobre la muerte y el olvido. Siente que la memoria de su padre se desvanecerá cuando Simón muera y las páginas mecanografiadas sean olvidadas.

20

En este capítulo, Miguel visita el Valle de los Caídos en busca de la tumba de su padre. Habla con un joven monje benedictino que le explica que la basílica es en gran parte una necrópolis y que hay miles de personas enterradas allí. Sin embargo, el monje le dice que su padre no puede estar enterrado allí, ya que los columbarios se construyeron después de la muerte de su padre. Miguel insiste en que su padre está enterrado allí y discute con el monje sobre la legitimidad del régimen franquista. El monje le explica que muchos de los restos están mezclados y que es difícil identificar a las personas enterradas allí. Miguel decide esparcir las cenizas de su madre en el Valle de los Caídos y se siente liberado. Luego, va a cenar con Helena y tienen una conversación sobre la marihuana y la libertad de elegir su propia vida. Al final del capítulo, Miguel se da cuenta de que ha dejado de pensar en su hija y se pregunta si eso lo convierte en un mal padre.

Sexta parte Julio de 2014

21

En este capítulo, Carmen recibe la noticia de que se jubilará en dos semanas. Jan, su amante, no entiende por qué Carmen quiere renunciar a su posición en la empresa y le insiste en que siga trabajando. Carmen, sin embargo, está decidida a dejarlo todo y disfrutar de su jubilación. Por la noche, Carmen decide romper con Jan y dejarlo con una caja de sus pertenencias en la puerta de su casa. Carmen reflexiona sobre su vida y su incapacidad para comprometerse en relaciones duraderas. Decide que quiere vivir sin restricciones y disfrutar de su libertad. Mientras tanto, en Madrid, Miguel y Helena visitan el Museo del Prado y Helena le confiesa a Miguel que tuvo una relación con una mujer mientras estaba casada. Helena se siente culpable por haberle sido infiel a su esposo y por el impacto que tuvo en su hijo. Helena también le cuenta a Miguel sobre su relación con Louise y cómo su esposo nunca la perdonó. Helena se siente atrapada en sus recuerdos y busca consuelo en Miguel. Finalmente, Helena le pide a Miguel que la acompañe a Barcelona mientras ella hace turismo y él intenta reconquistar a Carmen. Miguel acepta y Helena se siente aliviada de no tener que enfrentar su viaje a Malmö sola.

22

En este capítulo, una mujer se adentra en un sendero en busca de su perro perdido. En su búsqueda, encuentra a su perro forcejeando con algo y descubre una mano sobresaliendo de la tierra. Aterrorizada, retrocede y huye del lugar. Mientras tanto, Raquel visita a una adivinadora para pedirle ayuda en sus planes. La adivinadora le advierte que hay un peligro más grande que se acerca y que su hijo puede ser parte de ello. Raquel se enfada y considera a la adivinadora una charlatana. Luego, Raquel regresa a su casa y encuentra a su hijo leyendo. Le cuenta la historia de su nacimiento y le asegura que siempre estarán juntos. Más tarde, Raquel encuentra a su esposo, Sture, viendo las noticias sobre el descubrimiento del cuerpo de Yasmina. Sture confiesa que Yasmina era una de las prostitutas con las que se involucraba y que teme que la policía lo relacione con su muerte. Raquel intenta consolarlo y le asegura que podrán seguir con su vida. En otro lugar, el subcomisario Gövan y la inspectora Inga examinan el cuerpo de Yasmina y discuten sobre la posibilidad de detener a Sture. Gövan planea utilizar la muerte de Yasmina para su beneficio político. Finalmente, Fátima, la madre de Yasmina, visita el cuerpo de su hija en el tanatorio y se enfrenta a Gövan. Fátima muestra indiferencia hacia la muerte de Yasmina y Gövan la acusa de no haber protegido a su hija.

23

En este capítulo, Carmen escribe una carta a Miguel en la que reflexiona sobre su esterilidad y la muerte de su madre. Aunque no siente la llamada de la maternidad, confiesa que la esterilidad es mal vista y teme ser juzgada. También le cuenta a Miguel sobre la última vez que estuvo con su madre en la playa y cómo le habló de él. Carmen decide darle los tarros de piedras que su madre le pidió que guardara a su padre.

Después de leer la carta, Miguel se encuentra con Carmen en un restaurante en Barcelona. Aunque al principio está nervioso y considera marcharse, decide quedarse y tener una conversación formal con ella. Sin embargo, la conversación no fluye y ambos se dan cuenta de que el pasado ya no importa. A pesar de esto, deciden seguir viéndose y cerrar un círculo entre ellos.

Después de la cena, Miguel camina con Carmen hacia la parada de taxis y se dan cuenta de que ya no pueden volver a ser lo que eran. Se despiden prometiéndose volver a verse, pero ambos saben que no será así.

Más tarde, Helena está en su habitación de hotel pensando en Miguel y Carmen. Escucha una canción que le recuerda a Louise y se siente triste. Sin embargo, se da cuenta de que debe alegrarse por Miguel y decide aceptar su destino y seguir adelante con su viaje.

En ese momento, Miguel llega a la habitación de Helena y le confiesa que ha decidido ser valiente y ser él mismo. Helena se sorprende pero también se siente atraída por él. Miguel le expresa sus sentimientos y la besa. Aunque Helena se muestra escéptica, Miguel está decidido a vivir el presente y no dejar que la literatura del amor sustituya la realidad.

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En este capítulo, Helena y Miguel disfrutan de su intimidad en la oscuridad de la habitación. Han tenido una noche apasionada y se sienten conectados el uno al otro. Sin embargo, Miguel menciona que le hubiera gustado conocer a Helena antes, lo que despierta en él celos retrospectivos. Helena se da cuenta de esto y se aparta con precaución. Miguel explica que no se refería a los celos, sino a otra cosa.

Helena va a buscar una cajetilla de cigarrillos y Miguel la admira mientras se mueve por la habitación. Luego, Miguel le explica a Helena que ha vivido los momentos más intensos de su vida con ella y que esto va más allá de una simple aventura de una noche. Helena se sorprende y le pregunta si insinúa que lo que tienen es más que una relación casual.

Miguel admite que podría ser ese hombre que es ahora, que podría ser feliz y reconocer ese sentimiento como amor. Helena se emociona y le dice que ella será su memoria, que recordará por los dos.

Al día siguiente, Miguel despierta y encuentra la cama vacía. Helena ha salido a la terraza a fumar un cigarrillo. Miguel se siente renovado y lleno de energía, pero también nota que Helena parece diferente. Le pregunta qué le pasa y ella le cuenta su pasado.

Helena le explica que tuvo que hacer un viaje a España por motivos profesionales y también para escapar de la situación con su hijo David y Louise. Durante el viaje, conoció a Louise y vivieron momentos felices juntas. Sin embargo, Louise le pidió a Helena que eligiera entre ella y su vida anterior. Helena decidió regresar a casa con su esposo Walter y su hijo David.

Helena también revela que su hijo David murió en un accidente mientras ella estaba en coma. Esto la devastó y la hizo sentir culpable por no estar allí para él. Después de despertar del coma, Helena visitó la tumba de su hijo y se sintió como una intrusa en su propia vida.

Miguel se sorprende por la historia de Helena y le pregunta por qué quiere ir a Malmö a ver a Abdul, el hombre que destrozó la vida de su madre. Helena explica que quiere enfrentar su pasado y ver la cara de Abdul, aunque no sabe si él todavía vive allí.

Miguel sugiere que vayan juntos al mar para encontrar un momento de paz y felicidad. Helena duda al principio, pero finalmente confía en Miguel y se sumerge en el agua con él. Miguel le asegura que nunca la dejará hundirse y Helena decide creerle.

En este capítulo, Helena revela su pasado doloroso a Miguel y juntos encuentran un momento de tranquilidad en el mar.

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En este capítulo, la historia se desarrolla en Barcelona dos semanas después de los eventos anteriores. Gustavo, con los ojos inyectados de cocaína, se burla de Natalia sobre su padre y su nueva relación. Natalia se arrepiente de no haber borrado los mensajes de su padre en los que le cuenta en qué hotel se hospeda. Gustavo está decidido a vengarse de Miguel por la paliza que le dio y decide que va a arruinar su vida. Mientras tanto, Miguel y Helena están planeando un viaje a Australia y hablan sobre su relación y cómo se sienten el uno con el otro. Helena está entusiasmada con el viaje y está dispuesta a ir a cualquier parte con Miguel. Natalia, por otro lado, está atrapada en una relación abusiva con Gustavo y se siente impotente para escapar. Gustavo la maltrata física y emocionalmente, y Natalia teme por su vida y la de su hijo no nacido. Mientras Gustavo se prepara para matar a Miguel, Helena llega a la habitación y es asesinada por Gustavo. Miguel intenta luchar contra Gustavo, pero es golpeado y herido. Finalmente, Miguel logra dispararle a Gustavo, pero Helena ya está muerta.

Séptima parte Agosto de 2014

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En este capítulo, Natalia y Miguel continúan lidiando con las consecuencias de lo sucedido semanas atrás. A pesar de las recomendaciones del médico, Natalia sigue fumando. Miguel se preocupa por la salud de su hija y del bebé que está esperando. Aunque no hablan mucho sobre lo ocurrido, Natalia le confiesa a Miguel que Gustavo ha contado a la policía lo sucedido en Sevilla, pero ella ha negado todo. Miguel consuela a Natalia y le asegura que no es culpa suya, sino de Gustavo. Natalia expresa su pesar por la muerte de Helena y le hubiera gustado conocerla. Miguel decide fumar y beber alcohol, buscando evadir el dolor y la realidad. Miguel revela a Natalia que no irá con ella a Sevilla, sino que irá a Malmö. Miguel visita a David, un amigo de Helena, en Malmö. David se sorprende y entristece al enterarse de la muerte de Helena. Miguel miente sobre la causa de su muerte y se despide de David. Al ver a Fátima, la asistenta de David, Miguel reflexiona sobre cómo las personas pueden estar conectadas de manera misteriosa, incluso sin conocerse.

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En este capítulo, Fátima finalmente recibe el cuerpo de Yasmina, que ha sido profanado para realizar una autopsia. Fátima realiza los rituales funerarios y se despide de su hija en el cementerio. A pesar de su tristeza, Fátima decide volver al trabajo para mantenerse ocupada y evitar enfrentarse a su padre, Abdul. Sin embargo, Abdul se muestra frío y distante con ella, exigiendo que deje su trabajo y se ocupe de él. Fátima intenta convencer a su padre de que testifique contra Sture, el presunto asesino de Yasmina, pero Abdul se niega y la echa de la casa. Fátima confronta a su padre sobre su complicidad en los abusos que sufrió por parte de Sture y revela que también abortó varios embarazos. Fátima decide hablar con la policía y contarles todo lo que sabe sobre Abdul y Sture. Mientras tanto, Abdul se enfrenta a sus propios remordimientos y recuerdos del pasado, especialmente de su participación en el asesinato de Enrique Pizarro. Abdul se siente atrapado entre el miedo a ser descubierto y la necesidad de mantener su reputación. Finalmente, Abdul sufre un derrame cerebral y queda paralizado en el suelo de su casa.

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En este capítulo, Gövan se encuentra en un solar oscuro y desolado, esperando a alguien. Aunque está seguro de que nadie lo ha seguido, examina los alrededores con desconfianza. Gövan reflexiona sobre su relación con Yasmina y cómo ha cambiado su perspectiva sobre ella. Aunque todavía siente cierta tristeza por ella, ya no está obsesionado como antes. Gövan también se preocupa por la inspectora jefa Inga, quien sigue presionándolo sobre el número de teléfono que le prometió investigar. Gövan ha logrado evitarla hasta ahora, pero sabe que Inga es persistente. También está preocupado por Fátima, la madre de Yasmina, quien está luchando por justicia para su hija. Gövan ha filtrado información sobre el pasado de la familia para minar su apoyo público. Sin embargo, todavía hay un hilo suelto: Sture. Gövan se encuentra con Sture en el solar y discuten sobre el material que Yasmina le dio a Sture. Sture propone un trato en el que ambos se beneficien, pero Gövan desconfía de sus intenciones. A pesar de esto, Gövan le da a Sture información comprometedora sobre sus hombres como muestra de buena voluntad. Mientras tanto, Erick, el hijo de Sture, está en su habitación recordando su relación con Yasmina y su odio hacia Sture. Después de una discusión con su madre, Erick confronta a Sture en el bar y se enfrentan. Erick amenaza a Sture con un cuchillo, pero finalmente no lo apuñala. En cambio, Erick se encuentra con Inga en el paseo marítimo y la apuñala repetidamente hasta matarla.

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En este capítulo, Raquel asiste al entierro de Sture bajo la lluvia. Erick, su hijo, es escoltado por dos policías y se permite un breve intercambio con su madre antes de ser llevado. Raquel amenaza a la inspectora Inga con hacerla responsable si algo le sucede a su hijo. Inga sospecha que Raquel está mintiendo y que ella misma ha hecho desaparecer una mochila con pruebas incriminatorias. Raquel confronta a Gövan, el próximo diputado, acusándolo de matar a Yasmina. Le propone un trato: ella se hará cargo del negocio a cambio de las pruebas contra él y la liberación de su hijo. Gövan acepta y Raquel le entrega la mochila. Al día siguiente, se encuentran en un parque y Gövan le informa que su hijo podrá obtener permisos en un par de meses. Sin embargo, Gövan intenta estrangular a Raquel al descubrir que lleva un micrófono oculto. Inga llega a tiempo para detenerlo y Raquel le entrega el micrófono. Finalmente, Gövan es arrestado y Raquel espera que le devuelvan a su hijo.

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En este capítulo, Miguel llega a Malmö y busca a Abdul, pero descubre que ha sido llevado al hospital. En el camino hacia el hospital, el taxista hace comentarios racistas que molestan a Miguel. Al llegar al hospital, Miguel visita a Abdul, quien está postrado en una silla de ruedas y apenas puede comunicarse. Miguel cuelga un retrato de Abdul en la habitación y le cuenta la vida de Helena, incluyendo su relación con Enrique y su muerte. Abdul reacciona con horror al ver el retrato y Miguel se va de la habitación. Luego, Miguel está en un avión y contempla una tormenta desde las alturas. Recuerda a su padre y su infancia en Extremadura. Finalmente, el avión aterriza en Sevilla y Miguel reflexiona sobre la belleza de la vida.

En este capítulo, se narra la vida de Miguel, un hombre mayor que pasa sus días sentado en un banco del paseo marítimo de Tarifa. Aunque su memoria está deteriorada y solo conserva imágenes sin contexto, siente una vaga nostalgia por algo perdido. Miguel vive en el pasado, donde los momentos se entrelazan y la realidad se confunde con las sensaciones. Su hija lo ayuda a vestirse y le abrocha los zapatos, mientras él disfruta del paisaje y del olor a mar. Una niña se acerca y le muestra unas caracolas, y Miguel siente un vínculo especial con ella y con su hija. Sin embargo, también experimenta miedo y se preocupa de ser olvidado. A veces, se olvida de su propio cuerpo y de su deterioro físico. Encuentra un papel en su bolsillo con el nombre "Helena" escrito, pero no recuerda su significado. Miguel siente dolor en el pecho y su padre, que está a su lado, le asegura que todo estará bien. A través de sus recuerdos, Miguel rememora momentos de su infancia, como cuando su padre lo llevaba en brazos bajo la lluvia. A pesar de su confusión, Miguel se aferra a los recuerdos y a las emociones que le quedan.

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