Persiguiendo a Silvia

30 minutos

1

En este capítulo, la protagonista se encuentra en el baño de señoras de su oficina, su lugar de tranquilidad. Se arregla y se maquilla mientras reflexiona sobre su apariencia física y su deseo de tener unos ojos más llamativos. Luego, se dirige al despacho de Álvaro, su jefe, para pedirle unos días de vacaciones. Álvaro se muestra reacio a concedérselos, pero la protagonista utiliza su atractivo y su poder de seducción para intentar convencerlo. Finalmente, Álvaro accede a darle un día de vacaciones si ella muestra su sujetador a sus compañeros de trabajo. La protagonista acepta y, al hacerlo, es levantada en el aire y golpea la cabeza en el techo, causando un agujero en el mismo.

2

En este capítulo, la protagonista narra cómo conoció a su jefe, Álvaro, durante una entrevista de trabajo. Desde el primer momento, la atracción entre ellos es evidente, pero Álvaro parece no interesarse en tener una relación amorosa en el trabajo. A pesar de esto, la protagonista sigue fantaseando con él y tratando de seducirlo, sin éxito. Un día, coinciden en una fiesta y Álvaro le hace un cumplido, lo que provoca una reacción intensa en la protagonista. Sin embargo, sus amigas le advierten que Álvaro está hablando con otra mujer. A pesar de esto, la protagonista intenta seducirlo, pero sufre una serie de accidentes que la dejan en una situación embarazosa. Álvaro la ayuda y la acompaña a casa, pero en el coche se encuentran con las amigas de la protagonista, que hacen el ambiente incómodo. A pesar de todo, Álvaro se muestra amable y la protagonista se siente atraída por él.

3

En este capítulo, Silvia se encuentra en su trabajo cuando Álvaro se acerca a su mesa. Silvia sospecha que Álvaro quiere pedirle que trabaje más allá de su horario, pero en cambio, Álvaro le propone ir a comer juntos. Silvia se sorprende y se muestra reticente, ya que tiene que hacer la maleta para irse de vacaciones al día siguiente. A pesar de esto, Álvaro insiste en llevarla a casa y Silvia acepta. Durante el trayecto en coche, Álvaro le pregunta por qué le pidió un día libre, lo cual desencadena una discusión entre ellos. Silvia le recuerda que fue Álvaro quien terminó la relación y no entiende por qué se muestra celoso. Llegan a un punto muerto y Silvia decide bajarse del coche y regresar a casa. Una vez en casa, Silvia se sienta en el sofá y reflexiona sobre su relación con Álvaro. Sin embargo, Álvaro aparece en su casa y comienzan a discutir nuevamente. La discusión se transforma en pasión y terminan teniendo relaciones sexuales. Después de esto, Silvia decide irse de viaje y Álvaro se queda en su casa. Al final, Silvia se da cuenta de que se olvidó de pedirle las llaves a Álvaro.

4

En este capítulo, la protagonista narra cómo después de su fracasado intento de seducir a Álvaro en una fiesta, se obsesiona con él. Comienza a vigilarlo constantemente en la oficina, estudiando con quién come, se reúne y habla por teléfono. Esta obsesión la lleva a descuidarse físicamente y a dejar de maquillarse y usar tacones. Sin embargo, un día decide retomar su apariencia habitual y deja de prestarle atención a Álvaro. Aunque al principio no nota ningún cambio, poco a poco comienza a percibir tímidas sonrisas y un trato más cordial por parte de él. La protagonista aprovecha esta situación para hacer travesuras sin ser reprendida, pero pronto se aburre de ello. Un día, decide confrontar a Álvaro y preguntarle por qué no la regaña por sus acciones. Él responde de manera divertida y le dice que si lo hace, ella se sentirá obligada a esconderse. Finalmente, Álvaro le advierte que la estará vigilando, lo cual a la protagonista le encanta.

5

En este capítulo, la narradora presenta a su amiga Bea, una chica menuda pero atractiva que tiene una gran tolerancia al alcohol. Ambas son amigas desde la infancia y deciden ir juntas a la playa para relajarse y divertirse. A pesar de que la narradora prometió no tener que facturar la maleta de Bea, esta trae consigo una gran cantidad de ropa y accesorios. Al llegar a la playa, compran bebidas y se instalan en la arena. Mientras conversan, la narradora le pregunta a Bea si creen que son alcohólicas, a lo que Bea responde que solo beben para divertirse. La narradora menciona que ha tenido relaciones sexuales con Álvaro, lo cual la hace sentir mal consigo misma. Decidida a darse un baño, la narradora se sumerge en el agua y recuerda momentos íntimos con Álvaro. De repente, Bea le juega una broma asustándola en el agua, lo que provoca una pelea entre ambas. Al final, Bea menciona que el chico del chiringuito quiere invitarlas a un tequila y la narradora se lamenta de haber venido con ella a la playa.

6

En este capítulo, Silvia narra cómo Álvaro, su jefe, es una persona aparentemente comedida en su vida pública, pero en su vida personal le gusta el sexo brutal y salvaje. A pesar de ser personas opuestas, Silvia no puede controlar lo que siente por Álvaro. En la fiesta de Navidad, ambos beben más de lo habitual y comienzan a hacer apuestas absurdas. Silvia se apuesta con el resto de sus compañeros que puede hacer bailar una conga al jefe del jefe de Álvaro sin música. A pesar de la negativa del jefe, Silvia logra hacerlo y como castigo, ella y Álvaro se apuntan como voluntarios para el día solidario. Durante las vacaciones de Navidad, Silvia se prepara para seducir a Álvaro y el día del evento, ambos trabajan en la lavandería de un albergue para personas sin hogar. Después de un día agotador, Álvaro ofrece llevar a Silvia a casa y ella acepta. En el coche, Silvia confiesa que le gusta alguien, pero Álvaro no da ninguna señal de sus sentimientos. Al día siguiente, Álvaro le pide a Silvia que lo espere después del trabajo para hablar. Silvia espera en su despacho, pero Álvaro nunca aparece, dejándola plantada.

7

En este capítulo, la protagonista y su amiga Bea salen a un pub y se encuentran con varios hombres que intentan ligar con ellas. A pesar de no estar de humor, la protagonista finge ser simpática para complacer a Bea. Sin embargo, se da cuenta de que no tiene dinero y decide ir a buscar un cajero automático. Mientras tanto, Bea se va con uno de los hombres y la protagonista se queda sola en la playa, pensando en su exnovio Álvaro. Luego, se encuentra con una pareja extraña y presencia una discusión entre ellos. Después de un rato, el hombre se acerca a la protagonista y comienzan a hablar. Ella le cuenta parte de su vida y descubre que él es un famoso músico.

8

En este capítulo, la protagonista narra cómo se siente después de que Álvaro la dejara plantada durante cuarenta y cinco minutos. Al principio, se enfada mucho y piensa en vengarse, pero luego se siente triste y llora. Al día siguiente, intenta ignorar a Álvaro, pero no puede evitar seguirlo con la mirada. A pesar de todo, su relación vuelve a la normalidad y se mantiene cordial. Sin embargo, un día llega tarde a casa y descubre a un desconocido en su cocina. Asustada, se encierra en el baño y llama a Álvaro, quien llama a la policía. Después de un tiempo, la policía llega y descubren que el intruso era un antiguo inquilino que aún tenía las llaves. Álvaro se enfada mucho con el casero y promete tomar medidas legales. Finalmente, Álvaro se queda a pasar la noche con la protagonista para que no se sienta sola y ambos se acuestan juntos en la cama. La protagonista agradece a Álvaro por estar allí y él le dice que se siente seguro con ella. La protagonista también le confiesa que lo llamó a él porque él la hace sentir segura.

9

En este capítulo, se presenta a Gabriel, el cantante de Disruptive, como una estrella del rock actual que destaca entre la generación actual. Gabriel es descrito como un hombre guapo y macarra, con tatuajes en las manos y un estilo de pelo desordenado. A pesar de no ser fan de su música, la protagonista teme que su carrera en solitario no tenga éxito. Sin embargo, Gabriel se ha convertido en el nuevo chico malo de la música y ha ganado numerosos premios. Se revela que Gabriel es español y que comenzó su carrera en Los Ángeles después de ser descubierto por una agencia de modelos. La protagonista se encuentra con Gabriel en la playa y tienen una conversación en la que ella le cuenta sobre su vida. Gabriel invita a la protagonista a pasar la noche en su casa y juntos se dirigen hacia allí. Durante el camino, Gabriel expresa su opinión sobre el amor y la protagonista se cuestiona sus propias creencias. Finalmente, llegan a la casa de Gabriel y encuentran una habitación vacía donde la protagonista puede pasar la noche. Gabriel se despide de ella y le da un consejo sobre su relación pasada. La protagonista se queda pensando en Gabriel y en su personalidad macarra.

10

En este capítulo, Silvia se despierta en medio de la noche por el sonido de su propio ronquido. Descubre que Álvaro, su compañero de trabajo, también está despierto. Álvaro le confiesa que le cuesta dormir y Silvia le pide que le cuente algo para ayudarla a conciliar el sueño. Silvia le pregunta sobre su novia, pero Álvaro revela que no tiene una. Silvia imagina cómo sería la novia ideal de Álvaro y bromea sobre su ex novia. Después de una conversación íntima, Silvia se queda dormida y cuando despierta, Álvaro ya se ha ido. Álvaro explica que tiene una reunión temprano y se va a casa. Le pide a Silvia que descanse en casa en lugar de ir a la oficina.

11

En este capítulo, la protagonista narra dos de los despertares más extraños de su vida. En el primero, se despierta rodeada de basura y con un cerdito vietnamita enano teñido de rosa a su lado en la cama. En el segundo, una mujer irrumpe en su habitación gritando y la confunde con una prostituta. Después de un malentendido, la protagonista se encuentra con Gabriel, un hombre tatuado y atractivo, quien la invita a quedarse en su habitación. Mientras desayunan, la protagonista se siente atraída por Gabriel y se da cuenta de que le gusta a pesar de no gustarle los hombres tatuados. Gabriel le toca la guitarra y canta una canción que la conmueve profundamente. La protagonista se siente sola y desearía que esas palabras le fueran dedicadas a ella. A pesar de no conocerlo ni quererlo, Gabriel ha despertado algo en ella.

12

En este capítulo, Silvia decide darse una ducha y arreglarse para ir a trabajar después de pasar la noche en la cama de Álvaro. Aunque llega tarde, Álvaro la recibe amablemente y le ofrece su apoyo. Silvia comienza a pensar en la posibilidad de tener una relación con Álvaro y decide invitarlo a comer. Sin embargo, Álvaro le explica que tiene una reunión importante y no puede aceptar la invitación. A pesar de esto, Álvaro propone cenar juntos esa noche y Silvia acepta emocionada. Después de salir del trabajo, Silvia se prepara para la cita y espera nerviosa en el restaurante. Álvaro llega tarde debido a una reunión y se disculpa. Durante la cena, conversan y se divierten, y Silvia se da cuenta de que Álvaro es diferente fuera del trabajo. A pesar de algunos comentarios incómodos, la cena va bien y Silvia se siente atraída por Álvaro.

13

En este capítulo, Silvia se encuentra anonadada después de escuchar a Gabriel tocar la guitarra. Intenta encontrar algo que destense el ambiente, pero su teléfono móvil suena y es Bea, quien le informa que han sido expulsadas del hotel. Bea le cuenta que ha adelantado el vuelo y Silvia decide ir al aeropuerto. Antes de irse, Gabriel derrama café sobre ella y se ríe de la situación. Silvia se cambia de ropa y se despide de Gabriel, quien decide llevarla al aeropuerto. Durante el viaje, Gabriel conduce a gran velocidad y Silvia se siente emocionada. Llegan al aeropuerto y se despiden. Silvia se encuentra con Bea y le cuenta lo sucedido. Luego, Silvia se da cuenta de que ha perdido su teléfono móvil y decide llamar a Álvaro desde una cabina telefónica. Álvaro le pregunta por su móvil y Silvia le dice que lo ha perdido. Silvia reflexiona sobre su encuentro con Gabriel y se da cuenta de que tal vez es hora de dejar atrás ciertas cosas.

14

En este capítulo, Silvia y Álvaro continúan su cena y conversación. Silvia le reprocha a Álvaro por haberla dejado plantada sin avisar, pero él se disculpa y le pregunta si no está curiosa por saber lo que quería decirle. Silvia decide no preguntar y prefiere no saberlo para no pensar mal de Álvaro. Después de cenar, deciden ir a tomar una copa juntos en un local cercano. Silvia le advierte a Álvaro que el local es de dos de sus hermanos, quienes están allí trabajando como camareros. A pesar de esto, deciden entrar y Álvaro se presenta como el jefe de Silvia. Sus hermanos intentan llamar la atención de Silvia y Álvaro con una canción provocativa, pero ellos intentan ignorarlos. Luego, Silvia y Álvaro comparten un momento íntimo mientras fuman un cigarrillo afuera del local. Susana, una amiga de la infancia de Silvia, se acerca y le invita a su cumpleaños al día siguiente. Silvia acepta y Álvaro también se ofrece a ir. Después, Silvia y Álvaro comparten un taxi y Álvaro la acompaña hasta la puerta de su casa. Se despiden con un beso en la mejilla y Silvia se siente un poco decepcionada. Al llegar a su habitación, Silvia intenta enviar un mensaje a su amiga, pero por error se lo envía a Álvaro. Silvia entra en pánico y se siente avergonzada. Luego, recibe un mensaje de Álvaro en el que él le dice que está confuso pero que espera que el momento llegue. Silvia se siente aliviada y se da cuenta de que Álvaro también está interesado en ella.

15

En este capítulo, Silvia echa de menos su móvil, un iPhone 5 que tenía lleno de fotos de Matt Bomer. Aunque no solo lo extraña por su apariencia, sino también porque se siente dependiente de él. Sin embargo, su móvil no está perdido, sino que se encuentra en el coche de Gabriel, un músico con el que ha tenido un encuentro. Álvaro, su jefe, entra en su despacho y Silvia se da cuenta de que está molesto por su reciente viaje y su negativa a que la recogiera en el aeropuerto. Silvia decide pedirle a Álvaro que le devuelva las llaves de su casa. Mientras trabaja, Silvia recuerda los momentos compartidos con Álvaro y siente un dolor intenso. Gabriel, el músico, la llama por teléfono y le dice que le devolverá el móvil. Durante la conversación, Gabriel menciona que ha visto fotos interesantes en el móvil de Silvia y le pregunta sobre su relación con Álvaro. Silvia se siente incómoda y cuelga. Álvaro la interrumpe y le reprocha su comportamiento, pero Silvia le responde con sarcasmo. Álvaro la amenaza con una amonestación por escrito, pero Silvia se va sin decir nada más.

16

En este capítulo, Silvia se encuentra con Álvaro en el portal de su casa y se sorprende al verlo allí esperándola. Ambos se elogian mutuamente por su apariencia y se dirigen hacia el coche de Álvaro. Durante el viaje, conversan sobre la música que están escuchando y Silvia comenta que las canciones suenan sugerentes. Llegan a la fiesta de cumpleaños de una amiga de Silvia, pero se decepcionan al descubrir que es en un lugar poco animado. Intentan hacer lo mejor de la situación, pero deciden irse temprano. En el camino de regreso, deciden ir a una discoteca en un pueblo cercano. Bailan y coquetean en la pista de baile, y Álvaro le dice a Silvia que quiere hacerle daño. Finalmente, deciden ir a casa de Silvia y tienen relaciones sexuales apasionadas. Silvia se sorprende al tener múltiples orgasmos y Álvaro le advierte que la lastimará. A pesar de esto, continúan y ambos alcanzan el clímax.

17

En este capítulo, Silvia recibe un paquete con su móvil, que había perdido. Álvaro, su compañero de trabajo, le hace comentarios sarcásticos sobre su compra por internet. Silvia abre la caja y encuentra varias sorpresas: una nota divertida de Gabriel, una foto firmada de ellos dos, un vibrador, un conjunto de ropa interior y una bolsita de La Perla. Silvia muestra emocionada sus regalos a sus compañeros y Álvaro se muestra curioso. Silvia le explica que Gabriel le ha enviado todo. Álvaro se sorprende y coge la foto. Silvia guarda todo en la caja, excepto el móvil, y Álvaro se va a su despacho molesto. Silvia enciende su móvil y descubre fotos y un video de Gabriel. Luego encuentra el contacto "Señor Siniestro" y decide llamarlo. La llamada se corta y Silvia se siente triste. Gabriel la llama de vuelta y tienen una conversación divertida. Después, Silvia va al despacho de Álvaro y tienen un momento íntimo, pero él le pide que no haga tonterías y que sea normal. Silvia se va y reflexiona sobre su comportamiento impulsivo.

18

En este capítulo, Silvia y Álvaro continúan su encuentro sexual en la habitación de Silvia. Álvaro se muestra provocador y Silvia accede a tener relaciones sexuales con él. Después de un encuentro apasionado, Álvaro propone seguir viéndose fuera del trabajo, pero sin compromisos. Silvia acepta y se siente emocionada por la posibilidad de tener una relación con Álvaro. Al día siguiente, Silvia visita la casa de Álvaro y se sorprende al ver lo impersonal que es. Luego, tienen un encuentro sexual en la ducha y Silvia realiza un acto sexual oral a Álvaro. Después de esto, se sienten incómodos y deciden ir a desayunar juntos. Durante el desayuno, Silvia y Álvaro hablan sobre sus experiencias sexuales pasadas y deciden seguir viéndose sin compromisos.

19

En este capítulo, la protagonista está despierta a altas horas de la madrugada, bebiendo cerveza y viendo la televisión. Está cansada y no puede conciliar el sueño, y empieza a pensar en sus vacaciones y en la posibilidad de comprar un arma por Internet. Recuerda su viaje del año pasado con Álvaro y cómo disfrutaron juntos. Luego, cambia de canal y ve a Gabriel en la MTV, lo cual le sorprende. Le envía un mensaje y comienzan a hablar. Gabriel le cuenta que se aburre y ella le propone que la acompañe en su fin de semana de descanso. Después de un intercambio de mensajes, deciden encontrarse al día siguiente.

Al día siguiente, la protagonista está en la oficina y se viste de forma provocativa para llamar la atención de Álvaro. Tienen una discusión y ella decide marcharse antes de tiempo. En la recepción, se encuentra con Volte, un hombre enorme que le informa de que Gabriel está esperándola afuera. Ella se disculpa con Álvaro y se va con Gabriel en su coche. Gabriel le pide que vaya a buscar sus cosas y ella se sorprende de no saber a dónde van.

20

En este capítulo, Silvia narra cómo pasa el lunes después de haber tenido un fin de semana de sexo intenso con Álvaro. Aunque intentan disimularlo en el trabajo, Silvia se siente agotada físicamente. Al salir, se encuentran en la casa de Silvia y ella decide poner límites a Álvaro, negándose a tener relaciones sexuales sin más. Sin embargo, después de una conversación y algunos juegos previos, terminan teniendo sexo oral. Luego, Álvaro intenta penetrar a Silvia, pero ella le pide que se detenga. Después de un rato, finalmente tienen relaciones sexuales completas. Después del encuentro, Silvia se da cuenta de que está empezando a enamorarse de Álvaro y él también insinúa que siente lo mismo. Deciden seguir viéndose y Silvia considera tomar anticonceptivos.

21

En este capítulo, Silvia se prepara para un fin de semana de chicas con Gabriel. Aunque normalmente sus fines de semana de chicas son en su casa con sus amigas, esta vez decidieron ir a la casa de los padres de Bea en la sierra. Antes de salir, Silvia le envía un mensaje a su madre diciendo que estará en la sierra con Bea tomando el sol y bebiendo mojitos. Gabriel la espera afuera del coche y juntos se dirigen a un lugar desconocido. Silvia le pregunta a Gabriel si es gay, pero él le responde que le gustan las mujeres. Llegan a un hotel de lujo y se dirigen a la suite presidencial. Silvia se sorprende por el tamaño de la habitación y Gabriel le explica que es un regalo para ellas. Pasan el tiempo viendo capítulos de Sexo en Nueva York y disfrutando de las comodidades de la habitación. Silvia llama al conserje para pedir un masaje y otras cosas, y se sorprende por la eficiencia del servicio. Más tarde, Silvia y Gabriel se encuentran en la piscina del hotel, donde tienen una conversación sobre sus vidas amorosas. Gabriel confiesa que no cree en el amor y que solo tiene relaciones sexuales sin compromiso. Silvia se sorprende por su sinceridad y le pregunta si el sexo es importante para él. Gabriel responde que el sexo es uno de los motores que nos impulsa y que todos los pecados capitales son importantes. Silvia reflexiona sobre cómo el sexo ha cambiado para ella desde que estuvo con Álvaro y cómo ahora es parte del amor.

22

En este capítulo, la protagonista recibe los resultados de los análisis de Álvaro, que certifican que está completamente sano. Esa misma tarde tiene una cita con su ginecólogo para empezar a tomar la píldora anticonceptiva. Durante esa semana, establecen la rutina de verse todos los días después del trabajo, excepto la noche del miércoles. Deciden ir juntos a Ikea para comprar una estantería, pero el día resulta ser un caos debido a la cantidad de gente. Después de comer sushi, Álvaro le confiesa a la protagonista que está muy excitado y ella decide satisfacerlo en el coche. Luego, van a la casa de Álvaro y tienen relaciones sexuales intensas. Después de un segundo encuentro en la ducha, se acuestan en la cama y experimentan una conexión íntima. La protagonista le dice a Álvaro que solo necesitan hacer el amor y él responde irónicamente que suena a enamorarse. Terminan abrazados y se besan, reconociendo que pueden ser débiles y enamorarse.

23

En este capítulo, Silvia y Gabriel están tumbados en la cama después de cenar. Silvia le cuenta a Gabriel sobre los tatuajes que tiene en su cuerpo y él le muestra veintidós en total. Silvia elogia los tatuajes y Gabriel se ríe. Luego, Silvia le pide a Gabriel que le cuente cosas sobre él para poder conocerlo mejor. Gabriel le dice que no le gusta hablar mucho y prefiere escuchar. Silvia le anima a compartir sus gustos y Gabriel menciona que le gustan las rubias de tetas grandes y no le gustan los pelirrojos. Silvia le pide que hable de cosas más personales, pero Gabriel se muestra reacio. Después de un momento incómodo, Gabriel comienza a tocar la guitarra y canta una canción triste. Silvia queda impresionada por su talento y le dice que la canción es increíble. Gabriel se siente avergonzado y se disculpa antes de retirarse al baño. Silvia espera en la habitación y Gabriel la llama después de un tiempo. Él le cuenta que la canción le recuerda a una relación pasada en la que hizo daño a una chica. Gabriel acaricia el pelo de Silvia y le dice que es preciosa. Luego, Gabriel le pide a Silvia que duerman juntos y ella acepta. Silvia reflexiona sobre la conexión entre ellos y se pregunta si Gabriel está con ella para compensar el daño que hizo en el pasado.

24

En este capítulo, la protagonista, Silvia, reflexiona sobre su personalidad dramática y temeraria. A pesar de esto, tiene una relación secreta con Álvaro, su compañero de trabajo. Silvia disfruta de la compañía de sus amigos y se siente atraída por la idea de que piensen en ella de forma romántica. Sin embargo, cuando está con Álvaro, todo lo demás desaparece. Un día, Silvia descubre que tiene su período y teme que Álvaro no quiera estar con ella. A pesar de esto, decide ir a su casa y se sorprende al verlo tan atractivo. Álvaro propone hacer un truco de magia, pero Silvia le revela que lleva un tampón. A pesar de esto, Álvaro la besa y la excita de otras formas. Después de un orgasmo, Silvia se siente avergonzada y Álvaro le propone cocinar para ella. Silvia decide irse de viaje con su amiga Bea, pero Álvaro le envía un mensaje diciendo que la extraña. Silvia lo llama y se da cuenta de que está enamorada de él. Decide regresar a casa de Álvaro y él la recibe con alegría. Terminan besándose y Silvia se da cuenta de que está profundamente enamorada de él.

25

En este capítulo, la protagonista se despierta enroscada en Gabriel, pero se da cuenta de que están en un hotel y no con Álvaro. Disfruta del momento y luego salen a pasar el día por Serrano, donde hacen compras y se divierten. Gabriel insiste en comprarle algo y ella acepta una camiseta de Chanel. Después, van a comer juntos y luego regresan al hotel para ver más capítulos de Sexo en Nueva York. Hablan y se quedan dormidos. Al día siguiente, ella empaca sus cosas para regresar a casa y Gabriel la acompaña. Antes de irse, él le dice que le gustaría ver su casa y ella acepta. Gabriel se sorprende al ver lo pequeño que es su piso, pero ella se siente orgullosa de lo acogedor que lo ha hecho. Luego, Gabriel se despide y ella se queda pensando en lo bien que lo ha pasado con él. Aunque sabe que Gabriel puede tener a cualquier persona, valora la experiencia que ha tenido con él. Al final, Gabriel le dice que la llamará cuando llegue a Los Ángeles y ella llama a su amiga Bea para contarle sobre su fin de semana.

26

En este capítulo, Silvia y Álvaro continúan con su relación de pareja, saliendo juntos y compartiendo momentos íntimos. Silvia decide sorprender a Álvaro en su casa para contarle que ha dejado de tomar la píldora anticonceptiva y que ya ha empezado la segunda tableta. A pesar de que Álvaro está profundamente dormido al principio, Silvia logra despertarlo y tienen relaciones sexuales. Después de un momento de intimidad, deciden hacerse promesas y comprometerse a seguir amándose y respetándose. Al día siguiente, Silvia tiene un percance en la oficina al quedar atrapada en una máquina de vending, lo que provoca la preocupación de Álvaro y una discusión entre ellos. Sin embargo, logran reconciliarse y expresar sus sentimientos el uno al otro. A pesar de las dificultades, deciden seguir adelante con su relación y Álvaro le regala un pequeño regalo como muestra de su amor.

27

En este capítulo, Silvia sospecha que Álvaro ha tenido relaciones sexuales y decide confirmarlo. Álvaro reparte las vacaciones de verano en la oficina y cuando le toca el turno a Silvia, ella le pregunta directamente con quién se acostó el fin de semana. Álvaro confirma que ha estado con otra mujer y Silvia se siente herida. Luego, Silvia le pide a Álvaro que le conceda las últimas semanas de agosto y la primera de septiembre para sus vacaciones, pero él se niega. Silvia se siente frustrada y decide aceptar la invitación de Gabriel para ir a Los Ángeles. Más tarde, Álvaro confiesa que ha estado pensando en Silvia mientras estaba con la otra mujer. Silvia se enfada y le pide que se vaya de su casa. Después de una conversación telefónica con Gabriel, Silvia se da cuenta de que necesita alejarse de Álvaro y decide aceptar la oferta de Gabriel para ir a Los Ángeles.

28

En este capítulo, la narradora reflexiona sobre su relación con Álvaro y cómo el sexo ha sido una herramienta importante para conocerlo. Recuerda cómo en los dos años de relación han tenido mucho sexo convencional y han cumplido muchas fantasías. Luego, la narradora cuenta cómo Álvaro le propuso irse de vacaciones juntos a una casa cerca de la playa durante dos semanas. Ambos se muestran emocionados por el viaje y se dirigen hacia su destino en coche. Durante el trayecto, conversan sobre diferentes temas, incluyendo las fantasías sexuales de Álvaro. Llegan a Alcocebre, un pequeño pueblo costero, y se instalan en la casa de los tíos de Álvaro. La narradora describe la casa y el pueblo, y luego van juntos al supermercado a hacer la compra. Después de guardar las compras, la narradora se ducha y se relaja, mientras Álvaro prepara la cena. Después de cenar, tienen relaciones sexuales intensas y la narradora descubre algunas de las fantasías sexuales de Álvaro, incluyendo el sexo anal y la idea de verla con otra mujer. La narradora se siente sorprendida y asustada por estas fantasías, pero Álvaro la tranquiliza y le asegura que solo quiere hacer cosas que también le gusten a ella. Finalmente, se acuestan juntos y hacen el amor.

29

En este capítulo, Silvia se encuentra en el aeropuerto esperando para facturar su vuelo a Los Ángeles. A pesar de haberle contado una mentira a su familia sobre ir a una escuela de inglés, en realidad se va a encontrarse con Gabriel, su amigo. Sin embargo, Álvaro, su exnovio, la llama para despedirse y ella trata de evitarlo. A pesar de sus intentos, Álvaro la encuentra y trata de convencerla de que vuelvan a estar juntos. Silvia se muestra reticente, recordándole cómo la lastimó en el pasado. Finalmente, Silvia decide seguir adelante y se despide de Álvaro. En la sala VIP, recibe un mensaje de Álvaro pidiéndole que no lo odie, pero ella ya ha tomado la decisión de dejarlo atrás. Luego, recibe un mensaje de Gabriel, quien la espera con entusiasmo en Los Ángeles. Silvia decide dejar atrás a Álvaro y disfrutar de sus vacaciones con Gabriel.

30

En este capítulo, la protagonista recuerda unas vacaciones románticas en la playa con Álvaro, donde se sintieron más seguros y confiados en su relación. Al regresar a la rutina, Silvia se da cuenta de que depende demasiado de Álvaro y se plantea si esta dependencia es positiva. Con motivo del cumpleaños de Álvaro, Silvia busca un regalo especial y sus hermanos le sugieren que se ponga un lazo como regalo para él. Aunque al principio no entiende la idea, finalmente comprende que se refieren a un regalo más íntimo. Después de hablar con su amiga Nadia, Silvia decide probar cosas nuevas en la intimidad con Álvaro. En el día del cumpleaños de Álvaro, Silvia le revela su regalo y se disponen a experimentar nuevas prácticas sexuales. Aunque al principio Silvia se siente incómoda, finalmente se entrega al placer y experimenta un orgasmo intenso. Después del encuentro, Silvia se siente vulnerable y quiere que Álvaro la deje en paz, pero él la invita a ducharse juntos y le agradece por darse a él. Silvia se da cuenta de que no puede negarle nada a Álvaro y siente que es demasiado tarde para darse cuenta de su dependencia hacia él.

31

En este capítulo, Silvia llega al aeropuerto de Los Ángeles y pasa por el control de aduanas sin problemas. Allí es recibida por una chica que la lleva a una puerta de salida más discreta para evitar a los paparazzi. Silvia se encuentra con Gabriel, quien la recoge en un coche deportivo negro. Gabriel lleva un aspecto grunge de los años noventa y tienen un momento emotivo al abrazarse. Luego, se dirigen a la casa de Gabriel, que está ubicada en Toluka Lake y rodeada de famosos vecinos. Silvia queda impresionada por la opulencia de la casa y Gabriel le muestra todas las habitaciones, incluyendo un salón de cine y un vestidor. Silvia se siente emocionada y feliz de estar allí. Gabriel le promete que tendrán muchas actividades juntos, como comer tortitas cerca de Hollywood Boulevard, hacer turismo y cenar en su restaurante japonés favorito. Silvia se da cuenta de que ya no quiere irse de allí.

32

En este capítulo, la narradora cuenta cómo su relación con Álvaro ha sido una montaña rusa emocional. A pesar de las discusiones frecuentes y las diferencias entre ellos, siempre han logrado capear los problemas. Sin embargo, hay aspectos que han ocultado y que ahora salen a la luz.

Un día, después de una jornada estresante en el trabajo, la narradora llega a casa de Álvaro y se encuentra con una situación inesperada. Él la agarra con fuerza y la intimida, insinuando una fantasía de violación. Aunque ella intenta resistirse, Álvaro la somete y tienen relaciones sexuales de manera brusca y violenta. La narradora se siente confundida y avergonzada por haberse excitado a pesar de no haber disfrutado de la experiencia.

Después del encuentro, la narradora se va de la casa de Álvaro y decide poner fin a la relación. En el taxi, se desahoga llorando y reflexiona sobre su situación. Llega a la conclusión de que ha cedido demasiado a las fantasías y deseos de Álvaro sin tener en cuenta su propia comodidad y bienestar.

Al llegar a su casa, la narradora se ducha y reflexiona sobre su reacción. Decide confrontar a Álvaro y expresarle sus sentimientos. Durante la conversación, Álvaro se disculpa y confiesa que no sabe expresar sus sentimientos con palabras, pero que la adora y no puede imaginar su vida sin ella.

La narradora decide creer en las palabras de Álvaro y continúa la relación, estableciendo límites y comunicándose de manera más abierta. Durante el siguiente año, Álvaro cumple su promesa de demostrarle su amor y se muestra más atento y cariñoso. Sin embargo, la narradora se da cuenta de que aún no conoce completamente a Álvaro y que él mismo puede no conocerse a sí mismo.

A pesar de las dificultades, deciden seguir adelante y encontrar un equilibrio en su relación. Sin embargo, la narradora se pregunta si alguna vez conocerá al verdadero Álvaro, sin las máscaras y las mediaciones que los rodean.

33

En este capítulo, Silvia y Gabriel están en la piscina, disfrutando de la noche. Gabriel está mirando a Silvia en silencio y ella se acerca a él. Han pasado cinco días juntos y han dormido juntos todas las noches. Silvia se siente cómoda con Gabriel y se pregunta si esta complicidad es normal. Gabriel le pregunta en qué está pensando y ella le menciona que le babeó la tetilla. Ambos se ríen y continúan disfrutando de su tiempo juntos.

Luego, hablan sobre los regalos que Gabriel solía hacer a sus exnovias y Silvia comenta que esas chicas solo lo querían por su dinero. Gabriel le pregunta qué tipo de regalos le hacía su exnovio Álvaro y Silvia menciona que eran regalos clásicos como joyas. Silvia también revela que su padre se fue cuando ella era pequeña y que no tiene una buena relación con él. Gabriel le pregunta si le gustaba su trabajo y Silvia confiesa que no le gusta mucho, que es aburrido y mecánico. Gabriel le dice que uno debe dedicarse a algo que le guste y que sea útil. Luego, Gabriel le pregunta qué quiere de la vida y Silvia no está segura de qué responder. Gabriel le dice que todos quieren algo y Silvia le pregunta qué es lo que él quiere. Gabriel responde que quiere estar tranquilo y vivir como él quiera, sin envejecer. Silvia se preocupa por sus palabras y le dice que la vida es un regalo que no debe desperdiciarse. Gabriel le dice que no se preocupe y la abraza.

Silvia siente que Gabriel está más cerca de ella que cualquier otra persona en el mundo. Gabriel le advierte que es una persona difícil y que probablemente la lastimará sin darse cuenta. A pesar de esto, Silvia le asegura que nunca lo dejará hacerlo. Gabriel apoya la cabeza en el hombro de Silvia y menciona que no sabe qué hizo para merecerla, pero debe haber sido algo muy bueno.

34

En este capítulo, Silvia reflexiona sobre su relación con Álvaro y cómo ha evolucionado a lo largo del tiempo. Aunque el primer año de noviazgo fue un período de adaptación, el segundo año fue mucho mejor, ya que ambos sabían qué esperar del otro. A pesar de que Álvaro no era el tipo de persona dulce y romántica que aparece en las novelas, él le daba lo que ella necesitaba: abrazos, besos y una vida sexual activa. A medida que su relación avanzaba, Álvaro comenzó a mencionar la posibilidad de conocer a sus respectivas familias, lo cual aterraba a Silvia. Sin embargo, ambos decidieron hablar sobre sus sentimientos y el futuro de su relación. Álvaro confesó que había más que solo atracción física entre ellos y que estaba dispuesto a estar con ella para siempre. Aunque Silvia también expresaba su amor por Álvaro, su amiga Bea no estaba convencida de que él fuera bueno para ella. A pesar de las dudas, Silvia y Álvaro continuaron su relación y hablaron sobre las relaciones pasadas de Álvaro. Silvia se dio cuenta de que ella era la única persona que podía darle lo que él necesitaba, pero se preguntaba qué era exactamente lo que él necesitaba de ella.

35

En este capítulo, Silvia reflexiona sobre su vida y su trabajo en Ruiz&Ruiz. Recuerda que siempre tuvo la intención de hacer un máster de diseño gráfico, pero Álvaro le aconsejó que se centrara en su trabajo actual. Silvia se da cuenta de que no ha hecho nada por sí misma desde que entró en la empresa y decide que es hora de tomar decisiones para su futuro.

Mientras medita en el jardín, Gabriel le propone hacer un viaje improvisado a Las Vegas. Silvia acepta emocionada y en menos de quince minutos están en el coche rumbo a la ciudad del pecado. Durante el viaje, Silvia conduce por primera vez un coche automático y disfruta de la experiencia.

Al llegar a Las Vegas, Silvia se sorprende por la opulencia del hotel Aria donde se hospedarán. Gabriel le explica que tienen una tarjeta de crédito con mucho dinero y que no hay problema en gastarlo. Silvia se siente incómoda por la situación, pero Gabriel le asegura que no le importa pagar por ella.

Después de instalarse en la suite del hotel, deciden salir a cenar. Silvia se viste con un vestido llamativo y Gabriel se sorprende por su elección. Durante la cena, Gabriel le confiesa que le gustaría hacer el amor con ella, pero Silvia decide que no es el momento adecuado y prefiere mantener su relación en un nivel más emocional.

Al día siguiente, Silvia y Gabriel se despiertan resacosos después de una noche de fiesta en Las Vegas. Silvia reflexiona sobre sus acciones impulsivas, como casarse con Gabriel en una capilla de bodas. Gabriel le asegura que no es legal en España y que podrán solucionarlo más adelante.

Mientras pasean por Las Vegas Boulevard, Silvia y Gabriel presencian el espectáculo de las fuentes del Bellagio. Silvia se emociona y Gabriel le confiesa que si se hubieran acostado esa mañana, podría estar enamorándose de ella. Silvia le explica que lo que sintieron fue un calentón y que no quiere estropear su relación.

Después de ver las fotos de su boda en Las Vegas, Silvia y Gabriel deciden quedarse a ver el siguiente espectáculo de las fuentes. Mientras esperan, Gabriel le confiesa que no cree en el amor y que no quiere encapricharse de ella. A pesar de esto, se besan apasionadamente y Silvia se da cuenta de que no ha sido un beso de amor.

Silvia y Gabriel reflexionan sobre sus sentimientos y deciden que lo suyo no es amor. A pesar de esto, disfrutan de su tiempo juntos en Las Vegas y deciden seguir con su viaje.

36

En este capítulo, la narradora reflexiona sobre su relación con Álvaro y cómo se enamoró de él. A pesar de la frialdad y malicia que a veces muestra, ella ve destellos de su verdadera naturaleza cuando sonríe y se muestra relajado. La narradora describe la sensación que experimenta cuando Álvaro la toma de la mano y cómo su mirada la hace sentir especial. A pesar de las discusiones y peleas, la narradora siente una conexión profunda con Álvaro y cree que ejerce una influencia positiva en él. Álvaro confiesa haber tenido un trío en el pasado y la narradora, aunque celosa, se siente intrigada por la historia. Más tarde, Álvaro sorprende a la narradora al proponerle matrimonio y le muestra un anillo de compromiso. Aunque acepta, deciden esperar y hacer las cosas correctamente, conociendo a sus familias y planeando una propuesta más formal en un destino especial. Sin embargo, al final del capítulo, la narradora menciona que fue la última vez que vio el anillo.

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En este capítulo, Silvia reflexiona sobre su matrimonio no tradicional con Gabriel y sus sentimientos hacia él. Aunque no han discutido sobre su matrimonio ni sobre el beso que se dieron, Silvia se da cuenta de que está enamorándose de Gabriel y tiene miedo de lo que eso significa. En la habitación oscura, Gabriel y Silvia están abrazados, y ella se da cuenta de que la mano que la acaricia es la mano con el anillo de matrimonio. Tina interrumpe su momento al llamar a la puerta con una llamada urgente para Gabriel. Gabriel le pide a Tina que prepare el desayuno para Silvia y le dice que vuelva a dormir. Gabriel le comenta a Silvia que su abogado le ha regañado por casarse sin un contrato prenupcial, pero que han descubierto que también están casados en España. Silvia se preocupa por las consecuencias de esto, pero Gabriel sugiere que lo dejen así y no tramiten el divorcio. Silvia se preocupa por cómo reaccionará su madre y Gabriel le dice que diga que él es un buen partido. Gabriel le explica a Silvia que tendrán que firmar algunos documentos y que su abogado vendrá al día siguiente. Gabriel le propone a Silvia que trabaje como su asistente y ella se sorprende. Más tarde, Gabriel y Silvia deciden hacerse tatuajes juntos en un estudio de tatuajes. Silvia se pone nerviosa, pero finalmente acepta y se hace un tatuaje de un sol. Gabriel le propone a Silvia que se acuesten juntos, pero ella se niega. A pesar de sus sentimientos, Silvia intenta convencerse de que su relación con Gabriel no es amor y que no sufrirá. Sin embargo, Gabriel le confiesa que la quiere, lo que deja a Silvia confundida.

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En este capítulo, Silvia conoce a los padres de Álvaro en una fiesta en su casa. Aunque su madre y su hermana no la tratan bien, Silvia intenta mantenerse amable. Sin embargo, después de escuchar una conversación entre Álvaro y su madre, en la que ella critica a Silvia, Silvia se siente humillada y enfadada. Discuten en el coche de camino a casa y Álvaro le pide un tiempo para pensar. Silvia se va llorando y decide esperar a que Álvaro se dé cuenta de que su relación es especial.

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En este capítulo, Silvia se despide de Gabriel antes de regresar a Madrid. Aunque no quiere irse, sabe que debe hacerlo. Gabriel le asegura que estará siempre disponible para ella y que solo tiene que llamarlo. Silvia se despide de su habitación y del vestidor, sintiendo nostalgia por todo lo que ha vivido en la casa de Gabriel. A pesar de que firmó un contrato que le otorga derechos en caso de divorcio, Silvia no cree que Gabriel quiera separarse de ella. Gabriel le confiesa que si algo le sucede, todo será para ella. Silvia se preocupa por Gabriel y no le importa el dinero ni las propiedades, solo quiere estar con él. En el aeropuerto, Gabriel y Silvia son perseguidos por los paparazzi, pero Gabriel ha llamado a su equipo de seguridad para protegerla. Gabriel le regala algunas cosas antes de que Silvia se vaya. En el avión, Silvia se siente triste y piensa en lo que está sintiendo por Gabriel. Al llegar a Madrid, Silvia llama a Gabriel y le dice que lo extraña. Luego habla con su madre y le cuenta sobre su matrimonio con Gabriel, aunque su madre no lo toma muy bien. Silvia se reúne con sus hermanos, quienes se burlan de su matrimonio. Silvia muestra a su madre una revista con la noticia de su boda en Las Vegas. Su madre se preocupa y le pregunta si Gabriel la está utilizando. Silvia llama a Gabriel y lo pone en altavoz para que hable con su madre. Gabriel le asegura a su madre que la respeta y que estará ahí para ella. Silvia se da cuenta de que está enamorada de Gabriel, pero también tiene miedo de que él no crea en el amor.

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En este capítulo, Silvia pasa días malos después de la discusión con Álvaro. Espera que él la llame para arreglar las cosas, pero no recibe ninguna llamada. Habla con su amiga Bea, quien le dice que debería estar enfadada y que tal vez es hora de que Álvaro la vea llorar. Bea piensa que Silvia ya ha dado demasiado en la relación y que Álvaro no merece su sufrimiento. Silvia se levanta temprano el lunes para arreglarse y se encuentra con Álvaro en la oficina. Hablan en privado y Silvia le pide que arreglen las cosas, pero Álvaro no está seguro de si ese es el mejor lugar para hacerlo. Silvia se da cuenta de que Álvaro está distante y se pregunta qué estará pasando por su cabeza. Pasan los días y Álvaro se aleja cada vez más de Silvia, evitando encontrarse a solas con ella. Silvia se siente destrozada y desesperada. Intenta hablar con Álvaro, pero él se cierra en banda. Álvaro le dice que no quiere hacerle daño y que no está seguro de poder manejar la relación sin lastimarla. Silvia se siente impotente y no sabe qué hacer. Un día, Álvaro va a casa de Silvia y le pide tiempo para pensar. Silvia se siente decepcionada, pero acepta. Silvia se da cuenta de que ya no se reconoce a sí misma y decide salir con sus amigas para distraerse. En una discoteca, se encuentra con Álvaro y se besan apasionadamente. Luego, deciden ir a casa de Silvia y tienen relaciones sexuales. Después del encuentro, Silvia se da cuenta de que su relación con Álvaro está acabando y él se va sin decir mucho. Silvia se queda en la cama, sintiéndose triste y confundida. Álvaro le dice que no la sobrevivirá y se va. Silvia se da cuenta de que su historia con Álvaro está llegando a su fin.

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En este capítulo, Silvia se encuentra con Álvaro en un local. Ambos están vestidos de blanco y vaquero, pareciendo una pareja de modelos de catálogo. Silvia le muestra su tatuaje a Álvaro, quien se pone rígido al verlo. Luego, Silvia le muestra su anillo de matrimonio y le explica que se ha casado técnicamente con Gabriel, alguien importante para ella. Álvaro se enfurece y acusa a Silvia de no respetar el matrimonio. Silvia le responde con malicia y le dice que no lo llame puta. Álvaro le reprocha que pensaba que querían arreglar las cosas, pero Silvia le explica que él le ha hecho mucho daño y que siempre han tenido una relación superficial. Silvia le propone a Álvaro que pueden arreglar las cosas si se conocen mejor, pero que Gabriel seguirá siendo su marido en el papel. Álvaro no puede creerlo y se va del lugar. Silvia está segura de que volverá.

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En este capítulo, Silvia reflexiona sobre su relación con Álvaro después de su encuentro íntimo en el taxi. A pesar de su distanciamiento en el trabajo, Silvia está convencida de que Álvaro volverá. Durante las Navidades, Silvia miente a su familia sobre su relación con Álvaro y decide pasar la Nochevieja con su amiga Bea en lugar de estar con él. A su regreso, Silvia encuentra un mensaje de Álvaro en su contestador deseándole un feliz año nuevo, lo que la hace pensar que su relación se solucionará. Sin embargo, cuando Álvaro la lleva a casa, tienen una conversación tensa en la que él le dice que no pueden estar juntos y que está con otra persona. Silvia se siente devastada y llora desconsoladamente. Esa noche, se emborracha y escucha música triste, sintiéndose miserable. Al día siguiente, Silvia es visitada por la policía debido al ruido que hizo la noche anterior. En el trabajo, Silvia intenta seguir adelante, pero se siente destrozada al ver a Álvaro con su nueva pareja. Lucha por concentrarse en su trabajo y envía un correo a su amiga Bea contándole lo sucedido. Silvia se derrumba en el baño de la oficina y Álvaro entra para hablar con ella. Sin embargo, su conversación es breve y Álvaro le pide que se vaya a casa y se calme. Silvia regresa a casa en taxi, sintiéndose desesperada.

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En este capítulo, Silvia regresa a casa después de un mes y le cuenta a Álvaro que está casada con Gabriel. Aunque la situación entre ellos ha mejorado un poco, Gabriel todavía la trata con desdén. Silvia sabe que Gabriel volverá a su vida, incluso Bea está emocionada por su matrimonio. Silvia intenta explicarle a Bea que su relación con Gabriel no es lo que ella piensa, pero Bea se niega a ver la realidad. Silvia ha extrañado mucho a Gabriel y ahora que está de vuelta, se siente cómoda con él. Han estado hablando todos los días antes de acostarse. Silvia pensaba que Volte la estaría esperando para llevarla a un hotel, pero en su lugar encuentra a Gabriel en un coche deportivo frente a su trabajo. Se abrazan, pero no se besan. Gabriel le cuenta sobre los preparativos de su gira y Silvia pone el aire acondicionado. Gabriel le dice que le gustaría que ella estuviera con él en los EMA de este año y Silvia acepta emocionada. Saltan y gritan de alegría. Luego, Gabriel le confiesa que no sabe qué son los EMA y Silvia se sorprende. Gabriel le explica que son los European Music Awards de la MTV. Silvia se emociona aún más y Gabriel le dice que contratará a un estilista para que le consiga vestidos para la ocasión. Silvia se mide para darle las medidas al estilista y Gabriel hace comentarios juguetones. Luego, Gabriel le pregunta si quiere ver Sexo en Nueva York y Silvia se emociona aún más cuando descubre que Gabriel tiene una colección de Elie Saab. Están felices juntos.

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En este capítulo, Silvia se siente molesta porque no volvió a llorar después de su ruptura con Álvaro. Decide pasar tres días en casa para descansar y reflexionar sobre su relación fallida. Durante este tiempo, piensa en cambiar su apariencia, trabajo y mudarse de ciudad. Un viernes por la tarde, recibe un mensaje de Álvaro diciéndole que no puede recogerla, pero que la verá en un restaurante a las nueve. Silvia se dirige al lugar y ve a los padres de Álvaro hablando con otra pareja. También ve a Jimena, la hermana de Álvaro, con su novio. Luego, ve a Álvaro y a su nueva novia, quien lleva el vestido rojo que Silvia solía usar. A pesar de todo, Silvia no puede odiar a la chica, ya que parece desesperada por la llegada de Álvaro. Cuando Álvaro se acerca a Silvia, ella le reprocha su comportamiento y le dice que ahora quiere hacerle daño. Álvaro intenta disculparse, pero Silvia le dice que es culpa suya por ser inseguro y depender de la opinión de los demás. Finalmente, Silvia y Álvaro se despiden y ella se da cuenta de que será su responsable en el trabajo a partir de ahora. El capítulo termina con Silvia tomando un taxi de regreso a casa, sintiéndose mal por la situación.

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En este capítulo, Silvia se aburre en el trabajo y se asusta cuando Álvaro la llama a su despacho. Álvaro le informa que sus vacaciones han sido aprobadas y le muestra unas revistas en las que aparece ella con Gabriel. Silvia le explica que su matrimonio con Gabriel es ficticio y que no está enamorada de él. Álvaro le confiesa que está preocupado por ella y le pide que investigue sobre Gabriel en internet. Silvia descubre que Gabriel ha tenido problemas con las drogas y se preocupa por él. Luego, Silvia se encuentra con Gabriel en un hotel de Ámsterdam, donde él tiene entrevistas con la prensa. Silvia se preocupa por Gabriel y él le confiesa que ha tenido problemas con las drogas en el pasado. Silvia le dice que lo quiere y Gabriel le confiesa que también la quiere, pero que no cree en la monogamia. Más tarde, Silvia se prepara para la gala de los European Music Awards y Gabriel gana un premio. Gabriel le propone matrimonio a Silvia en el escenario y ella acepta. Terminan el capítulo besándose y Silvia piensa en Álvaro.

46

En este capítulo, la tensión entre Álvaro y la narradora en el trabajo se vuelve insoportable. La narradora recibe un correo electrónico de advertencia de Álvaro jefe, quien amenaza con informar a Recursos Humanos sobre su relación pasada. Un día, al salir de la oficina, la narradora ve a Álvaro con su nueva novia y se siente herida. Dos días después, la narradora sigue a Álvaro y le pincha las ruedas del coche con una navaja suiza. A pesar de encontrar placer en su venganza, se siente desgraciada después. Álvaro entra al despacho con una expresión de enfado y la narradora se asusta. Álvaro la zarandea y la insulta, pero ella se defiende y amenaza con denunciarlo. Después de un momento de tensión, Álvaro la besa y tienen relaciones sexuales en el despacho. Al día siguiente, la narradora se siente arrepentida y preocupada por las consecuencias de sus acciones. Álvaro aparece con los dedos vendados y la narradora se alegra de su sufrimiento. Álvaro insiste en hablar con ella y la acompaña a su casa en coche. Discuten sobre su relación y la narradora se siente humillada. Álvaro le pide que se vaya y ella lo abofetea antes de irse. Cuando Álvaro abre la puerta a su nueva novia, la narradora decide marcharse para evitar más daño. La novia de Álvaro confronta a Álvaro y la narradora antes de que la narradora se despida diciéndole a Álvaro que se joda.

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En este capítulo, Silvia y Gabriel deciden quedarse en Ámsterdam unos días después de la gala. Gabriel está nominado en los American Music Awards y le pide a Silvia que lo acompañe a Los Ángeles, pero ella no puede debido a su trabajo. Gabriel le propone a Silvia que deje su trabajo y se convierta en su representante. Aunque Silvia tiene dudas, Gabriel insiste en que confía en ella y que juntos podrían tener éxito. Sin embargo, Silvia no está convencida de que pueda desempeñar ese papel. Gabriel le explica que necesita a alguien en quien confiar y que se siente presionado por las personas que lo rodean. Silvia se preocupa por la adicción de Gabriel a las drogas y le dice que no debería consumir marihuana. Gabriel se enfada y se aleja de ella. Más tarde, Gabriel confiesa que se siente solo y que no quiere llorar delante de Silvia. Silvia lo consuela y se da cuenta de que siente la necesidad de cuidar de él. Finalmente, deciden no dejarse llevar por sus deseos y se dan cuenta de que están enamorados, lo cual aterra a Silvia.

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En este capítulo, la narradora recibe una carta de Álvaro en la que él expresa su decisión de terminar la relación. Álvaro confiesa que se enamoró de la narradora, pero que no puede darle el amor puro que ella espera. Él explica que su idea de amor es encontrar a alguien que encaje en su vida y que el sexo sea el centro de su universo. A pesar de que la narradora siente un profundo amor por Álvaro, decide quemar la carta y deshacerse de todas las cosas que le pertenecen. Luego, visita a Álvaro para entregarle sus pertenencias y firmar una tregua. Aunque ambos sienten una conexión eléctrica al tocarse, entienden que no pueden estar juntos. La narradora finalmente le cuenta a su familia sobre la ruptura y les da los regalos que Álvaro le había dado.

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