35 minutos

En este capítulo, la protagonista nos muestra su habitación y nos describe su entorno. La habitación tiene una ventana con vistas al mar y está decorada de forma sencilla. La protagonista tiene un armario antiguo de madera, una cama amplia con sábanas blancas y una mesita de noche. En el armario tiene varios vestidos hechos por una costurera del pueblo. La protagonista también nos muestra una foto de sus padres y una novela que le gusta releer. Además, nos cuenta que tiene los ojos verdes y el pelo rubio heredados de su abuela. La protagonista también nos revela que le gusta ir descalza y disfrutar de la sensación de caminar sobre el suelo frío o la arena de la playa. Finalmente, la protagonista escucha un murmullo fuera de su habitación, lo cual indica que el comienzo de su historia está por llegar.

I PARTE

1

En este capítulo, el protagonista, Alejandro, decide escapar sin saber a dónde va. Siente que todo lo que ha querido alcanzar le ha quedado grande y se siente fracasado. Llama a sus padres desde el aeropuerto y les confiesa que necesita salir de allí, que no puede aguantar más. Aunque las cosas le van bien, siente una presión en el pecho que no le permite respirar. Su padre le sugiere que tome unas vacaciones y le propone que vaya a Barcelona, a una pequeña hospedería cerca del mar. Alejandro acepta y compra el billete. Se siente más tranquilo y dueño de sí mismo. Recibe un correo de su padre con una foto de la casa donde se hospedará, una casa blanca con ventanas y puertas azules. Sin pensarlo, decide ir a esa isla desconocida y atrapada en el tiempo, donde encontrará la vida en todo su esplendor.

2

En este capítulo, la protagonista, Maggie, narra cómo comenzó su nueva vida en la isla después de abrir su negocio de hospedería. Gracias al apoyo de su hermano, convirtió la antigua casa de su abuela en un lugar rentable. A través de ofertas y recomendaciones de clientes satisfechos, su negocio comenzó a prosperar. Además, Maggie disfrutaba de su vida en la isla, cultivando su propio huerto y llevando una vida sencilla y tranquila. Sin embargo, todo cambia cuando un día inesperadamente llega un nuevo huésped a su hospedería. Se trata de Alejandro, un hombre atractivo y misterioso que parece estar huyendo de algo. Aunque Maggie se siente incómoda por la presencia de Alejandro, no puede evitar sentirse atraída por él. A medida que interactúan, Maggie se da cuenta de que Alejandro esconde secretos y que su llegada podría cambiar su vida en la isla. A pesar de sus reservas, Maggie decide darle la bienvenida y mostrarle su habitación. Sin embargo, cuando Alejandro la toca, Maggie experimenta una conexión intensa y confusa. Aunque intenta mantenerse alejada de él, Maggie se siente intrigada por Alejandro y se pregunta qué impacto tendrá en su vida tranquila en la isla.

3

En este capítulo, la protagonista y Alejandro comen juntos, pero no tienen mucha conversación. La protagonista se siente atraída por Alejandro, pero intenta no parecer demasiado interesada. A pesar de esto, invita a Alejandro a sentarse con ella en su lugar favorito de la casa. Durante la comida, Alejandro le pregunta sobre la receta del cuscús y la protagonista se siente halagada por su elogio. Después de comer, Alejandro se retira a su habitación y la protagonista se pregunta por qué le interesa tanto conocerlo. Más tarde, Alejandro pasa por la cocina y la protagonista le ofrece fruta. Mientras ella trabaja, Alejandro le coloca un mechón de pelo detrás de la oreja, lo que la hace recordar una experiencia pasada. A pesar de esto, la protagonista se siente tranquila cuando Alejandro se retira a su habitación sin tocarla. La protagonista reflexiona sobre la necesidad de estar solo y se siente reconfortada al hablar con su madre por teléfono. Por la noche, la protagonista ve a Alejandro sentado en el umbral de la ventana y ambos sonríen, sintiendo una conexión entre ellos.

4

En este capítulo, Alejandro se levanta tarde y baja a la cocina con aspecto cansado. Maggie le ofrece café y él acepta. A pesar de que Maggie ha estado moviéndose por la casa durante tres horas, Alejandro no se ha despertado por el ruido. Maggie intenta cocinar, pero Alejandro insiste en hacerlo él mismo. Forcejean con la cafetera y Alejandro termina arrebatándosela a Maggie. Maggie se da cuenta de lo cerca que está de él y de cómo huele, pero intenta mantener la compostura. Alejandro le dice que tiene que ir al pueblo y Maggie le ofrece comida en caso de que tenga hambre. Maggie visita a la señora Mercedes, quien le pregunta sobre Alejandro y le aconseja que se divierta con él. Maggie le explica que no quiere tener relaciones con un desconocido. De regreso a casa, Maggie encuentra a Alejandro en el porche y se sorprende de que haya puesto la mesa. Maggie prepara comida y reflexiona sobre su falta de vida sexual. Fantasea con Alejandro y decide llevarle un brazo de gitano a la señora Mercedes para que no hable tanto.

5

En este capítulo, la protagonista, Maggie, reflexiona sobre su atracción hacia Alejandro, a pesar de que no es su tipo de hombre. Aunque Alejandro es guapo y atractivo, Maggie se da cuenta de que tiene una actitud arrogante y presumida que no le gusta. Antes, Maggie habría caído rendida ante alguien como él, pero ahora ha cambiado y ya no está dispuesta a perderse por alguien que no vale la pena.

A medida que pasa el tiempo, Maggie y Alejandro comienzan a pasar más tiempo juntos y a conocerse mejor. Durante una caminata hacia una playa, Alejandro le pregunta a Maggie sobre su vida y por qué se mudó a la isla. Maggie se siente incómoda con estas preguntas y decide no revelarle su pasado.

En la playa, Maggie se siente atraída por la apariencia física de Alejandro, pero también se da cuenta de que hay algo en él que no es natural. A pesar de su atracción, Maggie se esfuerza por resistirse a él y no permitir que se acerque demasiado.

Mientras están en el agua, Alejandro le hace preguntas a Maggie sobre su vida y por qué se fue de su ciudad natal. Maggie se siente herida por estas preguntas y se aleja de él sin responder. Se siente frustrada y enojada por la forma en que Alejandro la ha hecho sentir.

Finalmente, Maggie le pide a Alejandro que no hable más y se sienta lejos de él en la playa. Se siente dolida y avergonzada por su reacción y se distrae buscando conchas en la arena. A pesar de su atracción por Alejandro, Maggie está decidida a no dejarse llevar por él y a mantenerse firme en su decisión de no involucrarse emocionalmente.

6

En este capítulo, Maggie se siente molesta y dolida por los comentarios de Alejandro sobre su atractivo y su pasado. A pesar de ello, deciden hacer las paces y Alejandro se disculpa por sus palabras. La señora Mercedes aconseja a Maggie que se reconcilie con la isla y le dé una oportunidad a Alejandro. Maggie decide llevar a Alejandro a una cala preciosa, donde se divierten y se bañan juntos. Después, se untan barro en el cuerpo y continúan jugando. Durante la conversación, Alejandro insinúa que le gustaría tener relaciones sexuales con Maggie, pero ella lo rechaza. A pesar de esto, ambos se sienten atraídos el uno por el otro. Terminan la tarde en la cala y regresan a casa en silencio, pero con una sonrisa en sus rostros.

7

En este capítulo, Maggie se despierta con un golpeteo en la puerta y descubre que es Alejandro. A pesar de estar resacosa, lo deja entrar y él se queda en su habitación. Maggie se siente incómoda por estar en ropa interior y con resaca, pero Alejandro no parece importarle. Después de un rato, deciden levantarse y Alejandro comienza a coquetear con Maggie, quien intenta resistirse a sus avances. Sin embargo, terminan en la cama juntos, pero Maggie decide detenerse y levantarse. Luego, deciden ir a la playa en la Vespa de Maggie y se divierten mucho en el camino. En la playa, Maggie intenta convencer a Alejandro de no desnudarse, pero él insiste y ambos terminan desnudos. A pesar de la tensión sexual, deciden no continuar y se sumergen en el agua. Mientras están en el agua, son interrumpidos por dos hombres en una barca que los ven y hacen comentarios graciosos. Esto rompe el momento y Maggie se aleja un poco. Finalmente, Maggie se pregunta si hay una atracción mutua entre ellos.

9

En este capítulo, Maggie regresa a casa y se prepara para la llegada de Alejandro. Aunque intenta convencerse de que no quiere acercarse a él, en realidad está deseando que sea él quien la detenga. Mientras prepara la cena, saca una botella de vino que tenía guardada, a pesar de que siempre ha dicho que no le gusta. Cuando Alejandro regresa, Maggie se siente abrumada por su atractivo y se imagina a sí misma desnudándose y metiéndose en la ducha con él. Sin embargo, se da cuenta de que sería peligroso y poco sexy. Durante la cena, Alejandro le pide permiso para llamarla Magdalena, ya que le gusta ese nombre. Maggie se burla de él y le pregunta por qué estaba buscando su nombre en Internet. Alejandro admite que estaba trasteando con su teléfono y buscando información sobre ella. Maggie se siente incómoda y le pide que apague el teléfono. Después de cenar, Alejandro pone música en Spotify y comienzan a hablar sobre sus vidas pasadas. Maggie revela que ganó la lotería a los 23 años y que eso fue el comienzo de todos sus problemas. Alejandro revela que vive en Nueva York y que recientemente rompió con su novia. Maggie también revela que rompió con su ex cuando decidió invertir en la casa de huéspedes. Hablan sobre sus relaciones pasadas y se dan cuenta de que tienen mucho en común. Sin embargo, cuando Alejandro sugiere ir a su habitación para hablar más, Maggie se niega y le explica que no se acuesta con desconocidos. La cena termina abruptamente y Maggie se siente sucia y ofendida. Reflexiona sobre la conversación y se da cuenta de que no quiere algo superficial, sino algo especial y cálido.

10

En este capítulo, la protagonista decide hacer una visita a la señora Mercedes. Aunque no tenía intención de ir, al pasar por delante de la pastelería y ver las medianoches recién hechas, decide comprar media docena y llevarlas a la casa de la señora Mercedes. Al llegar, la señora Mercedes le pregunta por su novio Espartaco, pero la protagonista le aclara que se llama Alejandro y que las cosas no van bien entre ellos.

La señora Mercedes invita a la protagonista a entrar y le ofrece un plato de all i pebre de rap. Mientras disfrutan de la comida, la protagonista le explica a la señora Mercedes que quiere que Alejandro se esfuerce más en la relación y que la trate de manera especial. La señora Mercedes le dice que lo que realmente quiere es enamorarse y no solo tener un rollo.

La protagonista admite que tiene miedo de que cuando Alejandro se vaya, vuelva a sentirse aburrida de la vida y que su cuerpo se apague. Está asustada de llegar a un punto de no retorno y de que los fantasmas de su pasado vuelvan a aparecer. A pesar de esto, la protagonista siente que Alejandro la entiende y que hay una conexión entre ellos.

La señora Mercedes le dice que el problema no es ella, sino que está buscando algo más en la vida. Le aconseja que se divierta y disfrute del momento, en lugar de complicarse la vida. La protagonista reflexiona sobre esto y se plantea la posibilidad de vivir el presente y dejar de preocuparse por el futuro.

En resumen, en este capítulo la protagonista visita a la señora Mercedes y hablan sobre su relación con Alejandro y sus miedos sobre el futuro. La señora Mercedes le aconseja que se divierta y disfrute del momento.

11

En este capítulo, Maggie se encuentra en el huerto recogiendo patatas cuando ve a Alejandro comiendo una manzana. Hablan sobre hacer sushi para la cena y deciden ir al pueblo a comprar los ingredientes necesarios. Maggie se cae mientras arranca una patata y tiene pensamientos eróticos sobre Alejandro. Despierta en medio de la noche después de soñar que comía sushi y se sentía enferma. Al día siguiente, Maggie se despierta y encuentra a Alejandro durmiendo en su habitación. Luego, Maggie reflexiona sobre su vida anterior en Madrid y se siente frustrada por haberlo dejado todo atrás. Decide bajar a por agua y pasa por la habitación de Alejandro, pero decide no entrar. Maggie se siente confundida y enfadada consigo misma. Luego, entra en la habitación de Alejandro y mira su ropa, reflexionando sobre la importancia de la apariencia en la forma en que las personas son tratadas. Maggie se siente frustrada y se pregunta qué ha hecho con su vida. Fuma un cigarrillo y se da cuenta de que ha tomado la decisión correcta al mudarse a la isla. Alejandro sorprende a Maggie con una cena preparada y discuten sobre sus expectativas en la relación. La discusión se intensifica y Maggie le tira vino en la cara a Alejandro. Maggie se encierra en su habitación y se desahoga rompiendo cosas. Luego, encuentra una foto de sus padres y llora. Maggie decide volver a conectar con su vida anterior y saca algunas de sus pertenencias de la maleta. Llora mientras sostiene su vestido y zapatos antiguos.

12

En este capítulo, el protagonista, Alejandro Duarte, se encuentra en una isla en medio de una crisis de ansiedad. Está molesto porque su padre le organizó unas vacaciones en una casa regentada por una mujer que considera completamente loca. A pesar de su enojo, decide quedarse en la isla para recuperar su depósito. Aunque inicialmente quería marcharse, se siente atraído por la belleza de una rubia que también está en la casa. A pesar de sus pensamientos lujuriosos, Alejandro reflexiona sobre su situación y se pregunta por qué no se fue cuando tuvo la oportunidad. A medida que se imagina encuentros sexuales con la rubia, se excita y decide masturbarse. Después de esto, se siente más tranquilo pero aún confundido por sus sentimientos hacia la mujer. A pesar de haber estado con mujeres más atractivas, Alejandro se da cuenta de que ninguna ha sido tan intensa como esta rubia y decide quedarse en la isla.

13

En este capítulo, la protagonista teme que Alejandro se haya ido después de su discusión, pero se encuentran en la cocina y deciden no hablar del tema. A pesar de la tensión, se disculpan y comparten un momento incómodo. La protagonista ofrece lavar la camiseta manchada de vino de Alejandro, pero él le dice que ya la lavó. Después de un rato de silencio, deciden hablar y la protagonista se disculpa por su comportamiento. Alejandro menciona que a él tampoco le gustan las cenas sofisticadas y la protagonista le dice que le gusta la sencillez. Luego, la protagonista va a casa de la señora Mercedes y piensa en lo agotador que es ser como ella. Durante su sesión de costura, la señora Mercedes le regala una caja de condones y ambas se ríen. La protagonista se va a casa y coloca los condones en su baño. Alejandro la recibe con entusiasmo y ella se da cuenta de que está empezando a enamorarse de él.

14

En este capítulo, la protagonista, Magdalena, se encuentra en casa con Alejandro, un hombre atractivo con el que siente una fuerte atracción. Mientras ambos están sentados en el porche, se miran intensamente y comienzan a coquetear. Magdalena se levanta para ir a la cocina y, en un momento de excitación, derrama agua sobre sí misma y sobre Alejandro. Esto los lleva a besarse apasionadamente y a tener relaciones sexuales en la cocina. Después de un encuentro sexual intenso, deciden continuar en la habitación de Magdalena. Durante el acto, experimentan un placer intenso y se entregan completamente el uno al otro. Después de terminar, Magdalena se siente confundida sobre qué significará esto para su relación con Alejandro. Sin embargo, en lugar de irse, Alejandro se queda a dormir junto a ella, y Magdalena se queda dormida en sus brazos. Aunque Magdalena tiene miedo de enamorarse y sufrir, no puede evitar sentirse reconfortada por la presencia de Alejandro. En un sueño, Magdalena habla con su madre y le pregunta si alguien la amará algún día, a lo que su madre responde que sí, pero que primero debe perdonarse a sí misma.

15

En este capítulo, Maggie y Alejandro pasan los dos días siguientes en la cama, sumidos en un estado de sopor. Se besan, se acarician y se masturban intensamente. En el segundo día, Alejandro sorprende a Maggie con nuevas experiencias sexuales. En el tercer día, deciden ser humanos de nuevo, pero terminan teniendo relaciones sexuales en la cocina. Durante estos días, Alejandro muestra a Maggie el mundo a través de su piel y comparten experiencias anteriores. También llenan el dormitorio de canciones y música suave. En el cuarto día, mientras están juntos, Maggie le pregunta a Alejandro hasta cuándo se quedará y él le dice que se irá cuando lleguen los primeros clientes, a principios de junio. Maggie siente una certeza de que es momento de volver a volar y dejar de castigarse. Se pregunta si Alejandro también ha sentido algo significativo y por qué aguanta. Finalmente, Alejandro confiesa que vino a la isla para escapar de algo y Maggie acepta que esto se quedará allí. Alejandro le pregunta si lo echará de menos cuando se vaya y Maggie responde que sí, pero Alejandro dice que es demasiado.

16

En este capítulo, la protagonista narra cómo tuvo una conversación íntima con Alejandro, en la que ambos compartieron detalles personales. Alejandro le habló de su familia, de sus hermanas pequeñas a las que adoraba y de su vida convencional. También reveló que dejó sus estudios de Historia del Arte para dedicarse a otra cosa, de la cual no hablaron. Además, mencionó que había tenido una relación de tres años con una chica, pero aún no había encontrado a una mujer que le marcara de verdad. Alejandro confesó que se sentía solo y que la soledad impuesta era un castigo. También reveló su rutina diaria, en la que madrugaba para correr por Central Park y luego iba a trabajar. Aunque tenía un buen estatus, admitió que a veces era estresante. Alejandro mencionó que le gustaba la ropa bonita y que prefería la sencillez en su estilo. Además, reveló que le atraían las mujeres sofisticadas y elegantes. La protagonista también compartió detalles sobre sí misma, como su adicción al tabaco y su relación con su familia. También mencionó que había tenido problemas en la escuela de diseño y que ganó la lotería, lo que le permitió perseguir su sueño. Al final del capítulo, la protagonista revela que está cerca de mostrarle a Alejandro su "hueso", y él promete responder como corresponde.

17

En este capítulo, la protagonista se da cuenta de que se está enamorando de Alejandro, pero ya es demasiado tarde. A pesar de que solo queda una semana antes de que él se vaya, deciden pasar todo su tiempo juntos. Comparten momentos íntimos, duermen juntos y tienen relaciones sexuales apasionadas. Sin embargo, una noche, ella descubre que ha tenido su período y le dice a Alejandro que no podrán tener relaciones sexuales. Él bromea al respecto y ella se siente avergonzada. Después de un momento incómodo, ella decide contarle su historia y cómo llegó a la isla. Le explica que ganó mucho dinero y se convirtió en una estilista exitosa, pero también se volvió adicta a las drogas y a una vida superficial. Finalmente, tuvo un colapso y decidió cambiar su vida. Alejandro la escucha atentamente y le confiesa que no quiere irse y que se ha enamorado de ella. Terminan abrazados y él promete hablar de su propia historia al día siguiente.

18

En este capítulo, Maggie se despierta sola en la cama y se siente incómoda al darse cuenta de que Alejandro ya se ha levantado. Bajan juntos a la cocina y descubre que Alejandro es un famoso modelo internacional. Maggie se siente insegura y se pregunta cómo pudo involucrarse con alguien así. A pesar de sus dudas, Maggie intenta tranquilizarse y aceptar la situación. Alejandro le explica que su padre lo envió a la isla para estar solo y ordenar sus pensamientos. Maggie intenta animarlo y le dice que su trabajo no debería avergonzarlo. Sin embargo, Maggie se siente insegura y se compara con las exuberantes modelos con las que Alejandro ha salido en el pasado. Alejandro se va a dar un paseo y Maggie se queda en casa, reflexionando sobre sus sentimientos y leyendo las revistas que hablan de él. Cuando Alejandro regresa, Maggie le confiesa que no quiere que se vaya nunca. Alejandro le explica que su trabajo como modelo requiere que viaje constantemente y que no puede quedarse. A pesar de esto, promete enviarle los billetes de avión para que puedan verse en el futuro.

II PARTE

19

En este capítulo, Magdalena se recupera lentamente después de despedir a Alejandro en la hospedería. Aunque intenta acompañarlo al ferri, Alejandro prefiere despedirse en privado para evitar ser vistos juntos. Magdalena llora en su silla y luego busca consuelo en la señora Mercedes, a quien le cuenta todo sobre Alejandro. La señora Mercedes se alegra por Magdalena y saca copitas de vino dulce para brindar. Magdalena reflexiona sobre lo especial que era Alejandro y cómo nunca había conocido a alguien como él. A pesar de su tristeza, el trabajo en la hospedería la mantiene ocupada y distraída. Magdalena se da cuenta de que ha dejado de pensar en Alejandro y su recuerdo se convierte en un sueño lejano. Un día, Magdalena recibe una llamada de Alejandro, quien le propone encontrarse en un hotel del pueblo durante una noche. Magdalena se siente decepcionada por la propuesta y le explica a Alejandro que no busca solo sexo. Alejandro le dice que piensa en ella todo el tiempo y le promete que la tendrá allí durante todo el mes de octubre. Magdalena se muestra escéptica y finalmente acepta la propuesta. La señora Mercedes consuela a Magdalena y le ofrece coserle un vestido para su viaje a Nueva York, aunque Magdalena no cree que vaya a poder ir. La señora Mercedes revela que su nieta está a cargo de la tiendecita de vestidos.

20

En este capítulo, Maggie se encuentra en el hotel atendiendo a los huéspedes. Está molesta por tener que limpiar el vómito de una de las invitadas y por no ser invitada a la despedida de soltera que se celebra en el salón. Mientras tanto, Alejandro no ha llamado en dos semanas y Maggie está obsesionada con él. Un día, Alejandro llama y le dice que está en la isla vecina pero que no puede regresar a tiempo para su cita. Maggie decide ir a buscarlo y deja a su amiga Mercedes a cargo del hotel. Después de buscar en varios hoteles, Maggie finalmente encuentra a Alejandro en su habitación. Se besan apasionadamente y tienen relaciones sexuales. Ambos experimentan un intenso placer y se entregan completamente el uno al otro. Al final, se ríen juntos y están felices de estar juntos.

21

En este capítulo, Maggie se despide de Alejandro, ya que él tiene que irse al aeropuerto y ella debe volver a sus obligaciones. Aunque apenas han dormido, no quieren perder tiempo y se despiden con muchos besos en el ascensor. Alejandro llama a Maggie tres veces a la semana y se cuentan cosas sobre sus días. La primera semana de septiembre, Maggie recibe dos billetes de avión a Nueva York como regalo de Alejandro. Después de pensarlo un día, decide aceptar el regalo y se prepara para el viaje. Llama a su hermano para que cierre su página web y anuncie que estará de vacaciones en Barcelona. Maggie se despide de su casa y se va a casa de la señora Mercedes para despedirse y recibir consejos. La señora Mercedes le regala un vestido precioso y le pide que tenga cuidado. Maggie se despide de sus padres y les cuenta que se va a Nueva York con Alejandro. Sus padres no están de acuerdo, pero Maggie les dice que ya tiene todo preparado y que no está pidiendo permiso. Maggie llega a Barcelona y se queda en casa de sus padres. Ellos están nerviosos y preocupados por su viaje. Alejandro llama a Maggie y le dice que enviará un coche para recogerla en el aeropuerto. Maggie le dice a sus padres que irá de todas formas y que ya tiene todo preparado. Maggie y Alejandro se despiden por teléfono y ella le dice que está deseando verlo. Maggie le dice a su madre que tiene miedo, pero que no quiere renunciar a conocer a alguien por miedo a lo que pueda pasar. Maggie le dice a su madre que Alejandro es el hombre de su vida.

22

En este capítulo, Maggie recibe la visita de sus hermanos Andrés y Juanjo, junto con la esposa de este último, Marisa. Andrés muestra a Maggie una foto de Alejandro desnudo, lo cual causa una reacción cómica en su familia. Luego, Andrés revela información sobre Alejandro, como que es argentino, tiene una doble nacionalidad y que ha salido con una modelo brasileña. También menciona rumores negativos sobre él, como participar en orgías violentas y tener tres hijos secretos. La familia de Maggie se sorprende y se preocupa por estas acusaciones, pero Andrés les asegura que son infundadas y que Alejandro es una persona limpia. A pesar de todo, Maggie se da cuenta de que su familia es un tanto excéntrica y espera no encontrarse con sorpresas desagradables en el futuro.

23

En este capítulo, la protagonista viaja a Nueva York para encontrarse con Alejandro. A pesar de las preocupaciones de sus padres, ellos le compran un móvil y se aseguran de que pueda recibir llamadas desde el extranjero. Durante el vuelo, la protagonista duerme la mayor parte del tiempo y se despierta para tomar algo de comer. Al llegar a Nueva York, es recibida por un hombre llamado Edgar, quien la lleva en coche hasta el apartamento de Alejandro. El apartamento no es lo que ella esperaba, pero le gusta la decoración cálida y ecléctica. Después de llamar a sus padres para tranquilizarlos, la protagonista se sorprende al encontrar un ramo de flores y una nota de bienvenida de Alejandro en la nevera. Explora el apartamento y se prepara para su cita con Alejandro en un restaurante llamado A.O.C. Cuando llega al restaurante, se encuentra con Alejandro y sus amigos. Pasan una velada animada y la protagonista se pone al día con el inglés. Finalmente, deciden irse a casa debido al jetlag y se entregan a la pasión en el taxi y en el apartamento de Alejandro. Después del encuentro íntimo, se dan cuenta de que su relación va más allá del sexo.

24

En este capítulo, la protagonista se despierta sola en la cama y encuentra a Alejandro en la cocina, sudado después de entrenar. Hablan sobre desayunar en la cama y Alejandro comenta que su padre todavía le lleva el desayuno a su madre de vez en cuando. Después de ducharse juntos, deciden planificar sus rutinas para el mes en Nueva York. Alejandro tiene compromisos de trabajo, pero también planean hacer turismo juntos. La protagonista se sorprende al darse cuenta de que estar con Alejandro podría abrirle oportunidades profesionales. Durante su estancia en Nueva York, Alejandro la lleva a lugares especiales y le muestra rincones que no aparecen en las guías turísticas. También van de compras y la protagonista tiene miedo de volver a ser la persona que era antes, obsesionada con la moda y el dinero. Sin embargo, Alejandro la anima a disfrutar y le compra algunas prendas. En una tienda de zapatos, la protagonista recibe un par de zapatos de regalo. Finalmente, se siente abrumada por el amor y el gasto, y le pide a Alejandro que la saque de la tienda.

25

En este capítulo, el protagonista describe su apartamento en Brooklyn y cómo se siente orgulloso de tenerlo, aunque no lo considera realmente suyo. Aunque le gusta, no ha dejado ninguna huella personal en él. Sin embargo, ha colgado fotografías de su familia y una postal de una cala que le recuerda a Magdalena, su novia. El protagonista reflexiona sobre su relación con Magdalena y cómo se siente confuso al respecto. Aunque ha tenido relaciones a distancia en el pasado, siente que su relación con Magdalena es diferente y se ha enamorado de ella. Describe cómo el sexo con ella se ha convertido en algo más que placer, en una conexión profunda. A pesar de que hay muchas cosas que no sabe sobre ella, solo quiere tenerla cerca. El protagonista habla con sus padres sobre la visita de Magdalena y se da cuenta de que está condenado a intentar una relación a distancia, aunque no sabe cómo funcionará. A pesar de sus miedos, disfruta de cada momento con Magdalena y sabe que eventualmente tendrá que tomar una decisión sobre su futuro juntos.

26

En este capítulo, la protagonista, Maggie, es despertada por Alejandro temprano en la mañana y se apresuran a prepararse para una sesión de fotos. Durante el trayecto en taxi, Maggie se siente insegura y preocupada por la presencia de otras chicas en la sesión. A pesar de que Alejandro intenta consolarla, Maggie se siente incómoda y comienza a cuestionar su relación con él. Por la noche, mientras Alejandro duerme, Maggie reflexiona sobre sus propias inseguridades y miedos, y se pregunta si realmente merece ser feliz. A medida que hace una lista mental de sus virtudes y defectos, Maggie se da cuenta de que está enamorada de Alejandro pero también está aterrorizada.

27

En este capítulo, la protagonista siente una angustia inexplicable a pesar de que todo va bien en su relación con Alejandro. Él le pregunta qué le pasa y ella le confiesa que se siente extraña. Tienen una conversación en la que él le dice que siente que ella ha cambiado desde que lo conoció y que ahora tiene expectativas en la vida. Deciden salir a cenar para hablar sobre su relación. Intentan reservar en un restaurante de moda, pero no consiguen mesa y terminan en otro restaurante cercano. Durante la cena, se conocen más detalles sobre sus gustos y personalidades. Después de beber mucho vino, salen del restaurante y se dejan llevar por la pasión, teniendo relaciones sexuales intensas en el sofá de su apartamento. Pasan toda la noche teniendo sexo sin parar.

28

En este capítulo, Magdalena despierta en la mañana y encuentra a Alejandro durmiendo en la cama. Tienen una conversación y Alejandro llama a su madre para felicitarla por su cumpleaños. Luego, Alejandro se lastima la espalda y Magdalena se ríe de él. Más tarde, se preparan para una fiesta y Magdalena se siente un poco incómoda en ese ambiente. Durante la fiesta, Magdalena reflexiona sobre su relación con Alejandro y sus preocupaciones sobre la distancia. Después de la fiesta, van a un bar y se emborrachan. Tienen una conversación sincera sobre sus sentimientos y Alejandro confiesa que se ha enamorado de Magdalena. Al día siguiente, Magdalena cuida de Alejandro mientras él está borracho y vomita. A pesar de todo, Magdalena se da cuenta de que está loca por él. Más tarde, salen a pasear y se sientan en un banco cerca del puente de Brooklyn. Alejandro le confiesa a Magdalena que se ha enamorado de ella y ella le corresponde. Terminan besándose.

29

En este capítulo, la protagonista recoge sus cosas del apartamento de Alejandro después de pasar un mes perfecto juntos. Aunque están tristes, se despiden con un último beso y Alejandro le dice que la quiere. De camino al aeropuerto, apenas hablan y se abrazan antes de separarse. Maggie regresa a casa y se encuentra con una recepción regular por parte de sus padres, quienes están preocupados por su relación con Alejandro. A pesar de esto, Maggie está emocionada y quiere compartir su felicidad con ellos. Después de pasar por Madrid para dejar su ropa glamurosa, Maggie regresa a la isla y se siente feliz de estar en su hogar. Sin embargo, poco a poco se da cuenta de que no puede mantener su felicidad y se siente triste. Llama a Alejandro y él le dice que es normal que su cuerpo le pida más. Maggie se da cuenta de que ha activado un interruptor de cambio de vida y que su mundo está esperando a que ese cambio se produzca.

30

En este capítulo, Maggie decide adelantar su regreso a España debido a que la casa en Nueva York le parece demasiado grande y vacía, y no están llegando reservas a su página web. Su plan es encontrarse con Alejandro en Madrid a mediados de noviembre. Maggie decide seguir el consejo de la señora Mercedes y se va a su piso en Madrid para distraerse un poco. Allí se encuentra con Irene, una amiga de la revista donde trabajaba, y le cuenta que está saliendo con Alejandro Duarte, lo cual sorprende a Irene. Maggie le cuenta cómo se enamoró de él y cómo ha cambiado su vida desde entonces. Irene le dice que debería aprovechar su relación con Alejandro y no preocuparse por los viejos vicios. Maggie reflexiona sobre si quiere volver a trabajar en la revista y decide hablarlo con Alejandro. Aunque puedan ser de mundos diferentes, Maggie cree que el amor puede superar cualquier obstáculo.

III PARTE

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En este capítulo, Magdalena narra el emocionante reencuentro con Alejandro después de unos días separados. Se siente como una niña al experimentar nuevamente la emoción de estar enamorada. Sin embargo, Alejandro comienza a darse cuenta de que el amor también complica la vida y trae consigo problemas y miedos. A pesar de esto, la pasión entre ellos es evidente y se entregan el uno al otro en la intimidad de la habitación. Magdalena se da cuenta de que salir con alguien famoso como Alejandro tiene sus desafíos, ya que muchas personas tienen una imagen preconcebida de él. A medida que su relación se vuelve más pública, comienzan a aparecer en revistas de cotilleo y se inventan historias sobre ellos. Magdalena se enfrenta a rumores de embarazo, lo que causa preocupación en su madre. Sin embargo, ella aclara que no está embarazada y promete a su madre que no le hará abuela. A pesar de los desafíos de la fama, Magdalena decide quedarse en Madrid por un tiempo y retomar su vida allí. Alejandro muestra cierta preocupación por su regreso a la ciudad, pero Magdalena está decidida a demostrarle que puede mantenerse sana y alejada de su pasado. Conoce a Irene, una periodista, y organiza una entrevista con Alejandro para su revista. La entrevista es un éxito y Magdalena se siente orgullosa de su relación con Alejandro.

32

En este capítulo, la protagonista, Magdalena, se queda en su casa mientras su novio Alejandro visita a su familia. Magdalena aprovecha este tiempo para redescubrir su espacio personal y hacer lo que le gusta sin preocuparse por las expectativas de sus padres. Sin embargo, se siente perdida y confundida sobre su futuro y la presión de los demás para que tome decisiones la agobia. Después de hablar con Alejandro y sus padres, decide regresar a la isla donde vivió durante dos años. Sin embargo, la soledad y las opiniones de los demás la hacen sentir aún más perdida. Decide regresar a Madrid antes de lo planeado y retoma algunas malas costumbres, como fumar. Alejandro se muestra preocupado por los cambios en Magdalena y le pide que no se esconda. Finalmente, Magdalena decide volver a la isla para tomar una decisión informada y recibe una llamada de antiguas clientas que la hace reconsiderar sus planes. Se siente atraída por la idea de retomar su carrera y brilla la posibilidad de un futuro brillante junto a Alejandro.

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En este capítulo, Magdalena comienza a trabajar nuevamente como estilista y personal shopper. Alejandro la apoya y se muestra ilusionado con su pasión por el trabajo. Magdalena se da cuenta de lo mucho que ama su trabajo y decide establecer su estudio en su casa. Pronto, su negocio comienza a crecer y tiene muchas clientas. Una de ellas le ofrece una oferta muy tentadora para trabajar exclusivamente para ella, lo que le permitiría ganar mucho dinero. Aunque al principio duda, finalmente acepta la oferta. Magdalena y Alejandro deciden mudarse juntos a Madrid y buscar un nuevo hogar. A pesar de las dudas y los miedos, deciden dar el paso y establecerse juntos. Magdalena conoce a los padres y hermanas de Alejandro, y a pesar de los nervios iniciales, se siente bienvenida en su familia. Magdalena se da cuenta de lo enamorada que está de Alejandro y de lo mucho que confía en él. A pesar de los desafíos y las incertidumbres, Magdalena está lista para enfrentar todas las primeras veces que les esperan en el futuro.

34

En este capítulo, Magdalena sale del baño en ropa interior y se encuentra con Alejandro, quien está hablando por teléfono. Alejandro se acerca a Magdalena y le hace comentarios coquetos. Luego, se despiden y Magdalena se viste para una cita. Tienen un encuentro sexual sin protección, a pesar de que Magdalena intenta detenerlo. Después, Magdalena se dirige a su estudio donde recibe a la señora del Valle y a su hija Camila. Magdalena les ofrece café y galletas, y comienza a tomar notas sobre el estilo de Camila. Luego, Magdalena propone visitar el armario de Camila para ayudarla a elegir su vestuario. Después de la reunión, Magdalena va de compras con la señora del Valle y Camila. Finalmente, Camila invita a Magdalena a tomar una copa con sus amigas y la señora del Valle le paga generosamente por sus servicios.

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En este capítulo, la protagonista cuenta cómo su vida ha cambiado desde que volvió a ganar dinero y su fama como estilista ha crecido. Aunque echa de menos la isla y a la señora Mercedes, se siente estable económicamente. Se compra un nuevo iPhone y crea perfiles en redes sociales para promocionar su trabajo. También empieza a salir más, pero de forma más tranquila y sin excesos. Conoce a Camila, Blanca y Margarita, quienes se convierten en sus amigas y forman un grupo muy unido. Intenta que Irene se una al grupo, pero ella prefiere no salir debido a su embarazo. Organiza una cena en su casa para presentarles a Alejandro, pero él se muestra tenso y decide irse pronto. La protagonista se da cuenta de que algo no va bien, pero decide no profundizar en ello. Alejandro se despide con un beso y ella se queda pensando en lo sucedido.

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En este capítulo, Maggie nota que Alejandro está distante después de su cena con las chicas en casa. Le pregunta si está molesto por haber salido tarde, pero él le dice que no le importa. Sin embargo, Alejandro le confiesa que no le gustan las amigas de Maggie. Aunque Maggie teme que Alejandro descubra los excesos de Camila y las chicas, él sale de casa sin profundizar en el tema. Más tarde, Alejandro regresa a casa y le pide a Maggie que se quede porque tiene algo importante que contarle. Le confiesa que él y Camila se conocían antes y tuvieron relaciones sexuales varias veces. Maggie se siente traicionada y enfadada, pero Alejandro le asegura que no fue nada serio y que no le gusta lo suficiente como para seguir viéndola. Maggie se siente insegura y celosa de Camila, pero Alejandro le asegura que ella es la que debería envidiar a Maggie. Maggie decide hablar con Camila y descubre que ella no le contó sobre su pasado con Alejandro porque no quería hacerle daño. A pesar de su enfado inicial, Maggie decide perdonar a Camila y seguir adelante.

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En este capítulo, la protagonista reflexiona sobre cómo ha pasado el primer año de su nueva vida en Madrid. Se siente abrumada por la rapidez y el ritmo acelerado de la ciudad, lo que la lleva a pasar unos días sin salir de casa. Recibe una llamada de la señora Mercedes, quien se queja de que ya no la llama con frecuencia. La protagonista miente y le dice que tiene mucho trabajo. La señora Mercedes se muestra orgullosa de ella y le pregunta por Espartaco, quien está de viaje en Los Ángeles. La protagonista promete que irá a visitarla pronto.

La protagonista también reflexiona sobre sus sentimientos hacia Camila y cómo estos la siguen afectando. A pesar de intentar olvidarla, sigue teniendo sueños y pensamientos relacionados con ella. Sin embargo, cuando Alejandro regresa de su viaje, la protagonista encuentra calma en sus brazos y acepta su propuesta de irse de vacaciones a la isla donde se conocieron. Allí, la protagonista se siente tranquila y descansa físicamente.

Después de las vacaciones, la protagonista vuela a Nueva York y al regresar retoma su trabajo como asesora de imagen. Una de sus amigas, Irene, da a luz a una niña llamada Nuria, a quien la protagonista adora. Sin embargo, sus otras amigas, Camila, Blanca y Margarita, hacen comentarios despectivos sobre el bebé, lo que molesta a la protagonista. A pesar de esto, la protagonista sigue manteniendo su amistad con Irene y su relación con las otras chicas se vuelve más tensa.

La protagonista y Alejandro deciden que es el momento de tener un hijo y empiezan a planificarlo. La protagonista visita al médico y decide dejar de fumar y llevar una vida saludable. Aunque Alejandro no está contento con su decisión de dejar de fumar, la protagonista decide no hacerlo en casa. Irene se alegra con la noticia de que serán padres, pero Camila, Blanca y Margarita se sienten abandonadas. La protagonista reflexiona sobre la importancia de alejarse de personas egoístas e inmaduras en su vida.

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En este capítulo, la protagonista reflexiona sobre cómo sus problemas comenzaron mucho antes de la explosión que cambió su vida. Se da cuenta de que permitió que las tristezas, inseguridades y mentiras se filtraran y pudrieran los cimientos de su personalidad. Aunque apartó de su vida las pequeñas paranoias e inseguridades, no pudo apartar la idea de que Alejandro, su pareja, tenía razón al decir que sus amigas no eran buenas compañías. Sin embargo, no se alejó de ellas, a pesar de tener a Irene, una amiga buena y comprensiva. La protagonista se sentía furiosa contra todo el mundo y especialmente contra Irene, a quien llegó a odiar intensamente. Competía constantemente con Camila, una amiga manipuladora y venenosa, en todo tipo de aspectos, desde la apariencia física hasta la popularidad. A pesar de su dependencia de Camila, la protagonista estaba cansada y la odiaba tanto como la quería. Alejandro, por su parte, no entendía lo que le estaba pasando a la protagonista y creía que todo se debía al estrés. Intentó animarla y hacer planes juntos, pero la protagonista solo escuchó lo que quiso y decidió que era hora de divertirse a lo bestia.

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En este capítulo, el narrador reflexiona sobre los cambios que ha experimentado Magdalena y cómo esto ha afectado su relación. Al principio, Magdalena era dulce y cariñosa, pero ahora está constantemente enfadada y distante. El narrador se preocupa por su salud física y mental, ya que ha perdido peso, come poco y mal, bebe mucho y siempre está cansada. También se preocupa por su relación con los demás, especialmente con su familia. El narrador encuentra apoyo en su amiga Irene, quien le sugiere que los comportamientos de Magdalena podrían ser indicativos de trastornos como la depresión y los trastornos de la personalidad. A pesar de todo, el narrador decide no involucrar a los padres de Magdalena y asumir que resolverán los problemas juntos como pareja. Además de los problemas con Magdalena, el narrador también enfrenta dificultades en su carrera profesional y se siente solo. A pesar de amar a Magdalena, se pregunta qué hacer cuando el amor se convierte en una fuente constante de obstáculos y complicaciones en su vida.

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En este capítulo, Magdalena llega a casa buscando a Alejandro después de haber ganado mucho dinero en su trabajo y queriendo celebrar su victoria con él. Sin embargo, al entrar al baño, descubre a Alejandro masturbándose en la ducha. Aunque al principio se sorprende, decide unirse a él y tener relaciones sexuales. Sin embargo, Alejandro no logra mantener la erección y se siente frustrado. Magdalena se preocupa por su reacción y comienza a cuestionarse si Alejandro está satisfecho con su relación. Más tarde, Magdalena se encuentra con sus amigas y discuten sobre la posibilidad de que Alejandro esté teniendo aventuras mientras está fuera de casa. Magdalena se niega a creerlo, pero comienza a sentirse insegura y preocupada. En otra ocasión, Magdalena sugiere a Alejandro tener una relación abierta, pero él se enfada y le dice que no quiere tener relaciones con otras personas. Magdalena también se da cuenta de que Alejandro no está contento con su cambio de apariencia, como cortarse el pelo y perder peso. A medida que pasa el tiempo, Alejandro se muestra cada vez más crítico y controlador con Magdalena, lo que lleva a discusiones y tensiones en su relación. Magdalena se siente atrapada y aburrida en su vida con Alejandro, y comienza a cuestionar su relación. A pesar de esto, Magdalena intenta tener intimidad con Alejandro, pero él se muestra distante y desinteresado. Finalmente, Magdalena decide ir a una fiesta sin Alejandro, lo que provoca una discusión entre ellos. Alejandro le dice a Magdalena que tiene un problema y que no está dispuesto a seguir sus demandas. La relación entre ellos se vuelve cada vez más tensa y distante.

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En este capítulo, la protagonista decide no ir a Nueva York debido a los problemas que tiene con Alejandro. En su lugar, decide quedarse con sus padres en la isla. Sus amigas intentan disuadirla, pero ella sigue adelante con su plan. Durante su estancia en la isla, la protagonista se entrega a la fiesta y consume drogas. Cuando Alejandro regresa, la encuentra en un estado lamentable y discuten. Alejandro decide terminar la relación y se va a Nueva York. La protagonista se queda destrozada y se da cuenta de que ha perdido a la persona que más quería en su vida.

IV PARTE

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En este capítulo, la protagonista narra cómo Alejandro ha decidido dejarla y cómo ella ha reaccionado ante esta situación. Aunque intentó suplicar y amenazar para que él cambiara de opinión, Alejandro se mantuvo firme en su decisión. La protagonista relata cómo fue testigo de la tristeza de Alejandro cuando se fue de la casa y cómo ella también lloró desconsoladamente. Sus padres la recogieron y se dieron cuenta de su estado de desnutrición y deshidratación. La protagonista se sentía avergonzada y culpable por haber hecho que todos los que la querían se sintieran decepcionados. Pasó días sin comer y escuchando a sus padres hablar sin asimilar nada. Intentó suicidarse tomando una caja entera de somníferos, pero su padre logró evitarlo a tiempo. Luego, se vio obligada a llamar a sus clientes para decirles que dejaba el negocio y que se marchaba de la ciudad. Algunas personas se alegraron de su ruptura, pero la protagonista tardó en darse cuenta de ello. Irene, una amiga, apareció y prometió ayudarla. La protagonista se dio cuenta de que estaba enferma y necesitaba ayuda, por lo que comenzó un tratamiento con un psicólogo y un psiquiatra. Descubrió que sufría de un trastorno de personalidad límite, lo que explicaba muchos de sus comportamientos autodestructivos. Decidió romper con las personas que la influenciaban negativamente y comenzó a recuperarse lentamente. Decidió volver a su casa en la isla y retomar su vida normal. Aunque seguía sintiendo añoranza por Alejandro, comenzó a reconstruir su huerto y a retomar las actividades que la hacían feliz. A pesar de los altibajos emocionales, la protagonista se dio cuenta de que estaba mejorando y de que había esperanza para su futuro.

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En este capítulo, la protagonista se encuentra en proceso de recuperación y preparando la casa de huéspedes para volver a abrir. Su hermano Andrés la visita y pasan tiempo juntos recordando su infancia. Durante este tiempo, la protagonista reflexiona sobre su felicidad y su relación pasada con Alejandro. Andrés le dice que nadie nace para ser feliz y que cada uno debe buscar su propia felicidad. La protagonista se siente triste al recordar su relación con Alejandro y cómo lo hizo sufrir. A pesar de esto, la casa de huéspedes comienza a recibir reservas y la protagonista se siente aliviada. Recibe a un grupo de universitarias que la hacen recordar su juventud y se divierte con ellas. Una de las chicas la reconoce como la exnovia de Alejandro y le pregunta sobre su relación. La protagonista les cuenta la verdad sobre su separación y cómo ella fue la responsable de su final. Después de esta confesión, se siente mejor y comprende algunas cosas. Decide llamar a Alejandro para pedirle perdón y contarle sobre su progreso en la recuperación. Aunque al principio él no quiere hablar, finalmente accede y se disculpa por haberla dejado. La protagonista le dice que está bien y que espera que algún día puedan encontrar un equilibrio juntos. Sin embargo, Alejandro le dice que es lo mejor para los dos y que no está preparado para volver. La protagonista cuelga y llora, pero siente que ha exorcizado sus demonios y agradece a Alejandro por haberla hecho crecer como persona.

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En este capítulo, la protagonista se encuentra contenta porque su casa está llena de huéspedes, a pesar de la crisis económica. La señora Mercedes sigue visitándola y bromeando sobre su pelo, que está creciendo después de haberlo teñido. Un día, mientras regresa a casa, la protagonista se cae y se lastima las rodillas, pero logra contestar el teléfono. Es Alejandro, quien le dice que necesita hablar con ella en persona. Aunque la protagonista teme que sea una noticia negativa, acepta su visita. Durante las dos semanas siguientes, la protagonista se siente ansiosa y pregunta a la señora Mercedes si parece drogadicta. Finalmente, Alejandro llega a la casa de la protagonista y se abrazan. Aunque intentan bromear, ambos sienten la tensión del pasado. Alejandro le dice que se quedará unos días y bromea sobre la posibilidad de que la protagonista tenga drogas en casa.

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En este capítulo, Magdalena recibe a Alejandro en su casa y charlan sobre sus vidas. Alejandro le cuenta que ha grabado un videoclip con una joven estrella del pop, pero se siente incómodo por la diferencia de edad entre ellos. Durante la cena, Magdalena se da cuenta de que Alejandro está distante y le pregunta si hay alguien más en su vida. Alejandro confirma que está saliendo con otras mujeres y Magdalena se siente devastada. Discuten sobre su relación pasada y Alejandro confiesa que se siente culpable por no haberla ayudado más durante su enfermedad. Magdalena se siente herida y se retira a su habitación, donde llora desconsoladamente. Alejandro la sigue y le entrega un anillo de compromiso que había comprado para ella, pero que ya no puede llevar consigo. Magdalena se da cuenta de que Alejandro aún la quiere, pero decide que deben separarse para evitar más dolor. A pesar de esto, se abrazan y se dan cuenta de que todavía se aman. Sin embargo, Magdalena insiste en que deben dejar de quererse para poder ser felices.

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En este capítulo, la protagonista, Magdalena, ha estado deprimida y llorando en la cama durante dos días. La señora Mercedes, una amiga mayor, la visita y la anima a levantarse y cuidarse. Magdalena le muestra un anillo que Alejandro le regaló y la señora Mercedes le aconseja que no lo lleve porque le duele emocionalmente. Magdalena le cuenta que Alejandro durmió con ella la noche anterior y lloraron juntos antes de que él se fuera. Magdalena expresa su deseo de que Alejandro sea feliz, aunque actualmente no puede sentirlo. La señora Mercedes le aconseja no desearle la muerte a nadie y en su lugar, desearles una gran almorrana. Magdalena se ríe y le salen mocos por la nariz. Después, Magdalena se obsesiona con las fotos de Alejandro con otra mujer en revistas y analiza cada detalle con su amiga Irene. Intenta criticar a la chica, pero se da cuenta de que eso no la hará sentir mejor. Magdalena llama a su hermano para obtener información sobre la chica y descubre que se llama Alice Walter, es periodista y tiene un programa en MTV. Magdalena se siente herida al enterarse de que Alejandro se sorprendió más por Alice que por ella. Su hermano le dice que no sabe si tienen relaciones sexuales, pero que son considerados la pareja de moda. Andrés le aconseja a Magdalena que deje de obsesionarse con Alejandro y vuelva a Barcelona para empezar de nuevo. Magdalena se da cuenta de que su lugar está allí y que la vida se lo ha enseñado.

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En este capítulo, Maggie se entera de que su ex, Alejandro, ha comenzado una nueva relación con Alice Walter. Aunque intenta no odiar a Alice, siente envidia de que ella esté ocupando el lugar que antes era suyo. Mientras tanto, Maggie pasa tiempo con la señora Mercedes viendo televisión, pero su tranquilidad se ve interrumpida cuando recibe una llamada de Ana, la nieta de Mercedes, informándole que ha sufrido una embolia. Maggie se siente culpable por no haber estado allí para ayudarla. Mientras visita a Mercedes en el hospital, Maggie se entera de que su padre se ha lastimado en un accidente doméstico y su madre no puede ir a consolarla. Maggie decide enfrentar la situación sola y no pedir ayuda a sus hermanos. En el hospital, Maggie recibe la visita inesperada de Alejandro, quien trae flores para Mercedes. A pesar de su tensión, Maggie y Alejandro deciden hablar y cerrar su relación de manera adulta. Sin embargo, la conversación se vuelve tensa y llena de resentimiento. Maggie se siente herida por las palabras de Alejandro y le dice que no quiere volver a verlo. Pero antes de que Alejandro se vaya, Maggie lo besa apasionadamente y terminan teniendo relaciones sexuales. Después del encuentro, ambos se dan cuenta de que fue un error y se despiden de manera fría y distante. Maggie se siente triste y confundida por lo que ha sucedido, pero decide seguir adelante y dejar atrás su relación con Alejandro.

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En este capítulo, Maggie habla por teléfono con Alejandro y le cuenta que ya le ha bajado la regla. A pesar de esto, deciden encontrarse en un hotel cercano al aeropuerto del Prat. Durante los siguientes meses, aprovechan los viajes de Alejandro para verse en diferentes hoteles, pero su relación se vuelve cada vez más fría y distante. Alejandro solo busca sexo y se marcha inmediatamente después de terminar. Maggie se siente usada y mendiga amor, pero sabe que Alejandro solo la utiliza para sentirse mejor. A pesar de esto, Maggie sigue enganchada a él y continúa viéndolo. Irene, su amiga, le aconseja que lo deje, pero Maggie no puede resistirse a la adicción que siente por él. Maggie se siente culpable y se castiga a sí misma por arruinar su relación. Irene le dice que es una tonta y que Alejandro solo la utiliza. Finalmente, Maggie se da cuenta de que Irene tiene razón y decide dejar de justificar la situación.

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En este capítulo, el protagonista reflexiona sobre su personalidad y sus acciones pasadas. Aunque no se considera una mala persona, reconoce que ha cometido actos de maldad y ha utilizado a Magdalena. La pérdida de ella ha sido lo más duro de su vida y no sabe cómo gestionar sus sentimientos. Después de tener relaciones sexuales con otra persona, se da cuenta de que el sexo sin amor es vacío y se siente culpable por querer seguir viviendo sin Magdalena. A medida que pasa el tiempo, su tristeza se convierte en rabia y se da cuenta de que sus expectativas sobre su relación eran irreales. Recuerda momentos con Magdalena y busca canciones que le recuerden a ella. Intenta superar su dolor a través del sexo, pero no le ayuda. El protagonista también descubre que Alice, su actual pareja, también tiene heridas del pasado. Finalmente, se pregunta si fue un mal novio para Alice y se da cuenta de que la lastimó porque la amaba demasiado y estaba enfadado. Reconoce que cometió errores por ser humano y sabe que tiene que seguir adelante.

50

En este capítulo, Magdalena experimenta un enfado acumulado que finalmente explota durante un encuentro sexual con Alejandro en un hotel. Después de un momento de intimidad, Magdalena intenta besar a Alejandro, pero él la rechaza y ella se da cuenta de que no merecen estar juntos. Magdalena se viste rápidamente y arroja la ropa de Alejandro por la ventana antes de irse. Más tarde, Alejandro la llama repetidamente, pero ella se niega a contestar y amenaza con denunciarlo por acoso. La señora Mercedes, presente en la cocina de Magdalena, comenta sobre la relación de ambos. Magdalena decide poner fin a su relación con Alejandro y se prepara para una visita a Madrid para hablar con Irene. A pesar de sentir decepción, Magdalena obedece y se encuentra con Alejandro en su estudio. Tienen una discusión intensa en la que Alejandro expresa su amor y odio hacia ella. Magdalena se da cuenta de que ya no pueden estar juntos y deciden no volver a verse. Alejandro recoge sus cosas y se va.

V PARTE

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En este capítulo, la protagonista reflexiona sobre el paso del tiempo y cómo su relación con Alejandro se ha vuelto extraña. A pesar de haber superado su adicción y entender la razón de su rabia, no logra curarse emocionalmente. Un día, Irene le advierte que Alejandro aparece en todas las revistas del mes, lo cual la sorprende y la lleva a comprar todas las revistas. Al llegar a casa, guarda un paquete de tabaco en el segundo cajón de la cocina y comienza a leer los artículos sobre Alejandro. Descubre que ha dejado las pasarelas y se menciona su posible incursión en el periodismo especializado de moda. También se habla de sus relaciones pasadas, especialmente de Magdalena Trastámara, su exnovia. A pesar de intentar hacerlo sonreír, Alejandro no menciona más detalles sobre su relación con Magdalena. La protagonista termina el capítulo con una sonrisa en la cara y decide fumarse los cigarrillos del paquete de emergencia.

53

En este capítulo, Maggie se niega a llamar a Alejandro a pesar de la insistencia de su madre. Aunque se imagina llamándolo y escuchando su voz, decide que su relación ha terminado y no quiere prolongar algo que ya ha acabado. Maggie reflexiona sobre lo que extraña de su relación con Alejandro, especialmente los momentos de intimidad y seguridad que compartían. A pesar de todo, Maggie decide que es egoísta querer volver a intentarlo y prefiere reconstruir su vida desde cero. Aunque su madre y su amiga Irene intentan convencerla de lo contrario, Maggie se entrega al trabajo y se sumerge en una vida más sencilla. Sin embargo, se siente confundida y se cuestiona por qué la simplicidad no la hace feliz. La señora Mercedes le habla de la vida como una madeja de hilo, con nudos y un principio y un final. Maggie reflexiona sobre la posibilidad de reescribir su historia y encontrar su propia forma de ser feliz.

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En este capítulo, Magdalena escribe una carta a Alejandro un año después de su separación. Aunque habían acordado no volver a verse, Magdalena siente la necesidad de compartir con él las conclusiones a las que ha llegado. Aunque no sabe si Alejandro leerá la carta, espera que sus padres se la entreguen. Magdalena reflexiona sobre el miedo al compromiso que la llevó a perder a Alejandro. Aunque pensaba que con él sería diferente, se dedicó a sabotear la relación y a romper las promesas que se hicieron. Magdalena también revela que ha aprendido que nunca estará con nadie más y que si no pudo ser con Alejandro, no será con nadie. A pesar de todo, Magdalena recuerda los momentos felices que vivieron juntos y reconoce que él merece una vida bonita y un amor mejor que el que ella le pudo dar. Magdalena confiesa que le cuesta aceptar que no pueden ser amigos y le pide a Alejandro que no vuelva si no tiene la intención de llevarla con él. Finalmente, Magdalena le desea felicidad y amor a Alejandro y le asegura que siempre lo amará.

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En este capítulo, la protagonista regresa del mercado y decide hacer batidos con la fruta que compró. Mientras se peina en su habitación, escucha un ruido fuera y se asoma por la ventana. Ve a un hombre alto y guapo acercándose a su casa. Al abrir la puerta, se dan cuenta de que se conocen y comienzan a conversar. El hombre, llamado Alejandro, busca un lugar tranquilo para quedarse y decide alquilar una habitación en la casa de la protagonista. Después de un momento de tensión, deciden ir a la playa juntos y se sientan en la arena. Hablan sobre su pasado y Alejandro confiesa que intentó tener una relación con otra persona, pero no funcionó. Finalmente, deciden darse unos días para descansar y disfrutar de sus vacaciones juntos.

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En este capítulo, los protagonistas hablan y se sinceran sobre cómo vivieron los últimos meses de su relación. El protagonista le cuenta a la protagonista cómo se sintió solo y triste después de la ruptura, y cómo intentó llenar ese vacío con otras chicas. Ambos recuerdan momentos felices de su relación y hablan sobre cuándo las cosas empezaron a ir mal. El protagonista confiesa que dejó de reconocer a la protagonista y que se cansó de buscarla en la persona en la que se había convertido. Sin embargo, la protagonista le asegura que no quiere cambiar y que solo quiere estar con él. Ambos se dan cuenta de que quieren estar juntos y que el amor que sienten es verdadero. Se besan y pasan la noche juntos, recordando momentos importantes de su relación. Al despertar, el protagonista le pone un anillo a la protagonista y se comprometen a estar juntos para siempre.

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En este capítulo, la protagonista reflexiona sobre las decisiones que ha tomado y cómo afectarán a su nueva vida. Aunque añora su antigua vida en Madrid, decide quedarse en la isla donde vive con su pareja. La señora Mercedes, una amiga, le aconseja que ambos deben comprometerse y apoyarse mutuamente en sus carreras. Así, deciden mudarse a Nueva York, donde la protagonista encuentra éxito en su trabajo como diseñadora de moda. Su estilo se vuelve popular y comienza a vestir a famosas. A pesar de su éxito, ella sigue manteniendo su compromiso de pasar seis meses al año en la isla con su pareja.

En este capítulo, la narradora describe su habitación y su entorno. Tiene una vista al mar y las cortinas blancas ondean alrededor de la ventana. Aunque antes solía andar desnuda por la casa, ya no lo hace debido a un incidente con la Guardia Civil. La habitación es sencilla y casi espartana, con una cama amplia y sábanas blancas bordadas. La narradora tiene un armario con vestidos y camisones, y encima del armario hay una maleta con zapatos y un vestido que utiliza cuando vuela a Nueva York. La señora Mercedes, una amiga de la narradora, teje los vestidos blancos que ella usa. La narradora también menciona que tiene los ojos verdes y el pelo castaño dorado, herencia de su madre. Aunque vive descalza, solo se pone zapatos cuando va al pueblo a comprar. Desde la ventana, la narradora ve a Alejandro y a su hija Isabela regresando de la playa. Isabela chapurrea frases en inglés, español y su propio idioma. La narradora baja las escaleras y ve a Alejandro, quien no ha cambiado desde que lo conoció. Él lleva a Isabela en brazos y la narradora besa a su hija. Alejandro menciona que la narradora no puede cargarla debido a su barriga, ya que está embarazada de Violeta, quien nacerá en poco más de un mes. La narradora se da cuenta de que sin la isla, no tendría nada de lo que tiene, ya que sus dos hijas fueron concebidas allí y ella y Alejandro sellaron su amor en sus playas. La isla ha sido siempre el lugar donde nacen las cosas que la hacen feliz.

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