El maestro de esgrima Perez-Reverte, Arturo Produced by calibre 0.6.26
El maestro de esgrima Sobrecubierta
El maestro de esgrima Sobrecubierta
En este capítulo, se nos presenta el ambiente en el que se desarrolla la historia, en los tiempos de las conspiraciones y los gobiernos corruptos. Se destaca la figura de Jaime Astarloa, el maestro de esgrima, que tiene una peculiar filosofía de vida basada en ciertos libros clave de su biblioteca. Astarloa tiene el sueño de escribir un tratado de esgrima que recoja la estocada más perfecta. En este ambiente, Astarloa conoce a Adela de Otero, una hermosa mujer que quiere aprender esgrima. A pesar de su resistencia inicial, Astarloa accede a enseñarle. Además, se introduce un sobre lacrado que contiene un enigma y que transforma la historia en una novela de intriga. A partir de aquí, la vida de Astarloa se ve alterada y se enfrenta a situaciones que ponen a prueba sus reglas y su filosofía de vida. Descubre que ha sido traicionado y se ve envuelto en una trama de asesinatos. A pesar de todo, Astarloa logra superar las dificultades gracias a su valentía y a sus conocimientos de esgrima. La novela concluye con una batalla final en la que Astarloa logra escribir su tratado con la estocada más perfecta.
Siguiendo este capítulo, el maestro de esgrima, Jaime Astarloa, imparte una lección a sus alumnos sobre la importancia de la técnica y la eficacia en la esgrima. Durante la clase, se lleva a cabo un combate entre dos de los alumnos, Paquito Cazorla y Alvarito Salanova, en el que se practican diferentes movimientos y paradas. Sin embargo, el combate se vuelve más intenso y Alvarito Salanova ataca de forma agresiva a Paquito Cazorla, quien comete un error y es golpeado. El maestro interviene y les recuerda la importancia de la disciplina y la seriedad en la esgrima, y les advierte sobre los peligros de jugar con las armas. Después de la clase, el maestro recibe una invitación de doña Adela de Otero para acudir a su domicilio. Al llegar, el maestro se encuentra con una mujer hermosa y misteriosa. Doña Adela le pide que le enseñe la estocada de los doscientos escudos, pero el maestro se muestra reticente debido a que nunca ha enseñado a una mujer. Sin embargo, ella insiste y le ofrece una gran suma de dinero. El maestro se siente intrigado y acepta enseñarle la estocada. Después de la visita, el maestro reflexiona sobre su vida y su carrera como esgrimista. Recuerda su juventud, su formación en Francia e Italia, y su relación con su antiguo maestro, Lucien de Montespan. También recuerda un duelo que tuvo en Roma y cómo se convirtió en maestro de armas en París. Finalmente, el maestro se prepara para el duelo con Jean de Rolandi, un maestro de armas que desafía su reputación.
Siguiendo este capítulo, se narra el desenlace del duelo entre Rolandi y Jaime Astarloa. Rolandi intenta sorprender a su adversario, pero Astarloa logra esquivar su ataque y le asesta una estocada mortal. Rolandi muere y Astarloa se retira de París para evitar problemas legales. Al regresar, se entera de la muerte de su maestro Montespan y se siente angustiado por no tener a quién legar sus armas. Astarloa reflexiona sobre su vida y su falta de arrepentimiento por haber amado y matado. Luego, se menciona que han pasado casi treinta años desde esos eventos y Astarloa se observa en el espejo de la galería de esgrima. Piensa en su cabello blanco y en su deseo de tener a alguien a quien legar sus armas cuando muera. Lamenta no haber conocido a Adela de Otero antes y se siente angustiado por su tardía aparición en su vida. En el Capítulo III, Astarloa se prepara para una cita con Adela de Otero. Se arregla y se observa en el espejo, satisfecho con su apariencia. Astarloa está emocionado por tener a una mujer como cliente y se recrea en la idea de tener un encuentro romántico con ella. Astarloa espera a Adela en su casa y cuando ella llega, se sorprende por su belleza y su actitud desafiante. Astarloa la invita a la galería de esgrima y ella queda fascinada por el ambiente decadente del lugar. Comienzan a practicar esgrima y Astarloa se da cuenta de que Adela es una excelente esgrimista. Durante el asalto, Adela se muestra agresiva y Astarloa se siente atraído por su determinación. A pesar de su diferencia de edad, Astarloa se siente atraído por Adela y se deja llevar por el juego de sentimientos que surge entre ellos. Terminan el asalto y Astarloa le ofrece seguir enseñándole esgrima. Adela acepta y se comprometen a encontrarse nuevamente. Astarloa se mira en el espejo y reflexiona sobre su vida y su falta de alguien a quien legar sus armas. Piensa en Adela y siente angustia por haberla conocido tarde en su vida. El capítulo termina con Astarloa pensando en su próxima cita con Adela y en su deseo de aprender más sobre ella.
Capítulo sin nombre 2
En este capítulo, se revela que hay un acuerdo secreto entre los partidos de izquierda exiliados y la Unión Liberal para destruir el régimen monárquico y elegir una Asamblea Constituyente. Don Lucas Rioseco se muestra en contra de la revolución y la república, mientras que Agapito Cárceles defiende la necesidad de un cambio. Se produce una discusión acalorada entre ellos y otros miembros de la tertulia. Luego, la conversación se centra en posibles sucesores para Isabel II, como el duque de Montpensier o el infante don Alfonso. La discusión se vuelve cada vez más política y se mencionan los pronunciamientos y las deportaciones que están ocurriendo. Después, la historia se traslada a las clases de esgrima de Jaime Astarloa con Adela de Otero. Se muestra cómo ella aprende rápidamente y cómo hay una tensión creciente entre ellos. Finalmente, se revela que Adela de Otero ha tenido experiencias pasadas y que Jaime Astarloa ha amado y perdido en el pasado. La historia termina con una conversación ambigua entre ellos, donde se insinúa que algo ha cambiado entre ellos y que su relación nunca será la misma.
Siguiendo este capítulo, don Jaime y Adela de Otero viajan en silencio en un coche. Don Jaime intenta aliviar la tensión entre ellos, pero teme empeorar las cosas. Adela le pregunta si entre sus clientes hay gente de calidad, como nobles, y don Jaime confirma que sí, aunque no muchos. Adela menciona a Luis de Ayala y don Jaime se sorprende de que lo conozca. Adela dice que le han hablado de él y que es uno de los mejores espadachines de Madrid. Don Jaime confirma esto y Adela le pregunta si es mejor que él. Don Jaime responde que es otro estilo y Adela expresa su deseo de enfrentarse a él en un asalto. Don Jaime le dice que es imposible, pero Adela insiste. Don Jaime se siente incómodo y preocupado por la situación. Adela le pide que hable con Luis de Ayala sobre ella y su habilidad en la esgrima. Don Jaime acepta a regañadientes y Adela se muestra emocionada. Después de esto, don Jaime cumple su palabra y habla con Luis de Ayala sobre Adela. Luis se muestra interesado y le pide a don Jaime que le hable más sobre ella. Don Jaime le cuenta lo que sabe y Luis se muestra complacido. Luego, Luis le pide a don Jaime un favor: guardar unos papeles importantes para él. Don Jaime acepta y Luis le entrega los papeles. Don Jaime se siente intrigado por todo esto y se pregunta si tiene algo que ver con Adela de Otero. Más tarde, don Jaime tiene una pesadilla en la que ve una muñeca ahogada y sin ojos. Se despierta angustiado y empapado de sudor. En los días siguientes, don Jaime nota que Luis de Ayala está inquieto y distraído durante los asaltos de esgrima. Un día, Luis le pide a don Jaime que salgan a pasear por el jardín y le pregunta cómo conoció a Adela de Otero. Don Jaime le cuenta lo sucedido y Luis se muestra preocupado. Luego, le pide a don Jaime un favor: guardar unos papeles importantes para él. Don Jaime acepta y Luis le entrega los papeles. Don Jaime se siente intrigado por todo esto y se pregunta si tiene algo que ver con Adela de Otero. Más tarde, don Jaime tiene una pesadilla en la que ve una muñeca ahogada y sin ojos. Se despierta angustiado y empapado de sudor. En los días siguientes, don Jaime nota que Luis de Ayala está inquieto y distraído durante los asaltos de esgrima. Un día, Luis le pide a don Jaime que salgan a pasear por el jardín y le pregunta cómo conoció a Adela de Otero. Don Jaime le cuenta lo sucedido y Luis se muestra preocupado. Luego, le pide a don Jaime un favor: guardar unos papeles importantes para él. Don Jaime acepta y Luis le entrega los papeles. Don Jaime se siente intrigado por todo esto y se pregunta si tiene algo que ver con Adela de Otero. Más tarde, don Jaime tiene una pesadilla en la que ve una muñeca ahogada y sin ojos. Se despierta angustiado y empapado de sudor. En los días siguientes, don Jaime nota que Luis de Ayala está inquieto y distraído durante los asaltos de esgrima. Un día, Luis le pide a don Jaime que salgan a pasear por el jardín y le pregunta cómo conoció a Adela de Otero. Don Jaime le cuenta lo sucedido y Luis se muestra preocupado. Luego, le pide a don Jaime un favor: guardar unos papeles importantes para él. Don Jaime acepta y Luis le entrega los papeles. Don Jaime se siente intrigado por todo esto y se pregunta si tiene algo que ver con Adela de Otero. Más tarde, don Jaime tiene una pesadilla en la que ve una muñeca ahogada y sin ojos. Se despierta angustiado y empapado de sudor. En los días siguientes, don Jaime nota que Luis de Ayala está inquieto y distraído durante los asaltos de esgrima. Un día, Luis le pide a don Jaime que salgan a pasear por el jardín y le pregunta cómo conoció a Adela de Otero. Don Jaime le cuenta lo sucedido y Luis se muestra preocupado. Luego, le pide a don Jaime un favor: guardar unos papeles importantes para él. Don Jaime acepta y Luis le entrega los papeles. Don Jaime se siente intrigado por todo esto y se pregunta si tiene algo que ver con Adela de Otero. Más tarde, don Jaime tiene una pesadilla en la que ve una muñeca ahogada y sin ojos. Se despierta angustiado y empapado de sudor. En los días siguientes, don Jaime nota que Luis de Ayala está inquieto y distraído durante los asaltos de esgrima. Un día, Luis le pide a don Jaime que salgan a pasear por el jardín y le pregunta cómo conoció a Adela de Otero. Don Jaime le cuenta lo sucedido y Luis se muestra preocupado. Luego, le pide a don Jaime un favor: guardar unos papeles importantes para él. Don Jaime acepta y Luis le entrega los papeles. Don Jaime se siente intrigado por todo esto y se pregunta si tiene algo que ver con Adela de Otero. Más tarde, don Jaime tiene una pesadilla en la que ve una muñeca ahogada y sin ojos. Se despierta angustiado y empapado de sudor. En los días siguientes, don Jaime nota que Luis de Ayala está inquieto y distraído durante los asaltos de esgrima. Un día, Luis le pide a don Jaime que salgan a pasear por el jardín y le pregunta cómo conoció a Adela de Otero. Don Jaime le cuenta lo sucedido y Luis se muestra preocupado. Luego, le pide a don Jaime un favor: guardar unos papeles importantes para él. Don Jaime acepta y Luis le entrega los papeles. Don Jaime se siente intrigado por todo esto y se pregunta si tiene algo que ver con Adela de Otero. Más tarde, don Jaime tiene una pesadilla en la que ve una muñeca ahogada y sin ojos. Se despierta angustiado y empapado de sudor. En los días siguientes, don Jaime nota que Luis de Ayala está inquieto y distraído durante los asaltos de esgrima. Un día, Luis le pide a don Jaime que salgan a pasear por el jardín y le pregunta cómo conoció a Adela de Otero. Don Jaime le cuenta lo sucedido y Luis se muestra preocupado. Luego, le pide a don Jaime un favor: guardar unos papeles importantes para él. Don Jaime acepta y Luis le entrega los papeles. Don Jaime se siente intrigado por todo esto y se pregunta si tiene algo que ver con Adela de Otero. Más tarde, don Jaime tiene una pesadilla en la que ve una muñeca ahogada y sin ojos. Se despierta angustiado y empapado de sudor. En los días siguientes, don Jaime nota que Luis de Ayala está inquieto y distraído durante los asaltos de esgrima. Un día, Luis le pide a don Jaime que salgan a pasear por el jardín y le pregunta cómo conoció a Adela de O
Siguiendo este capítulo, se narra cómo el protagonista, Jaime Astarloa, se entera de la situación política en Madrid. Se comenta que se ha proclamado el estado de guerra y se impone la censura sobre las noticias relacionadas con la sublevación. Se menciona que las tropas levantadas por Prim avanzan hacia Madrid. En la tertulia del Progreso, se discute sobre la actitud de la reina Isabel II y se especula sobre una posible guerra civil. Agapito Cárceles expresa su deseo de una guerra civil y la instauración de una república. Don Lucas Rioseco se opone a esta idea y se produce una discusión entre ambos. Jaime Astarloa se retira de la tertulia y sale a dar un paseo por la ciudad. Mientras camina, reflexiona sobre las polémicas y los disturbios que le han amargado la vida en los últimos tiempos. Luego, regresa a su estudio y se sumerge en la lectura de un libro. Durante la noche, escucha truenos y relámpagos debido a una tormenta. Al despertar, se afeita y se arregla para salir de casa. En el camino, se encuentra con un tumulto de gente frente a la casa del marqués de los Alumbres. Se entera de que el marqués ha sido asesinado y se especula sobre las posibles causas del crimen. Jaime Astarloa se dirige a la casa del marqués y es interrogado por el jefe de policía, Jenaro Campillo. Se menciona la desaparición de Adela de Otero, una mujer relacionada con el marqués. Jaime Astarloa oculta información sobre su relación con Adela y se marcha a su casa. Allí, abre un sobre que le entregó el marqués antes de morir y encuentra documentos comprometedores.
Capítulo sin nombre 3
En este capítulo, se emite una orden de detención contra varias personas sospechosas de conspiración criminal contra el Gobierno. Los detenidos son llevados a diferentes lugares de detención. Luego, se muestra una serie de correspondencia oficial entre diferentes autoridades, donde se informa sobre la detención de los sospechosos y su traslado a diferentes prisiones. También se menciona la muerte de Joaquín Vallespín, el Ministro de Gobernación, y la posterior muerte de Narváez, el principal apoyo político de la Reina Isabel II.
Después, se emite otra orden de detención contra otras personas sospechosas de alta traición y conspiración criminal. Se informa que estas personas han sido arrestadas y que se está coordinando con la autoridad militar correspondiente. También se menciona que algunos de los detenidos han sido deportados a diferentes lugares.
Luego, se muestra una serie de correspondencia entre diferentes autoridades, donde se informa sobre las detenciones y deportaciones de los sospechosos. También se menciona la muerte de Jaime Esplandiú Casals, condenado a muerte por sedición, alta traición y conspiración criminal contra el Gobierno.
Después, se muestra una carta de Pedro Sangonera Ortiz, Ministro de la Guerra, donde se informa sobre la deportación de algunos de los detenidos. También se menciona la ejecución de Esplandiú Casals.
Finalmente, se muestra una serie de notas oficiales y esquelas confidenciales entre Narváez y el Ministro de Gobernación, donde se mencionan actividades de los agentes de Prim en España y en el extranjero. El maestro de esgrima, Jaime Astarloa, lee estas notas y se da cuenta de que el Gobierno ha estado siguiendo de cerca los movimientos de los conspiradores.
Jaime Astarloa se siente confundido por toda la información que ha descubierto y decide buscar la ayuda de Agapito Cárceles, un amigo y experto en asuntos políticos. Astarloa encuentra una nota de Cárceles en su casa, donde le informa que ha salido para hacer algunas comprobaciones y le pide que confíe en él. Astarloa decide ir a casa de Cárceles para recuperar los documentos y obtener más información.
Siguiendo este capítulo, Jaime Astarloa se dirige a la casa de su amigo Agapito Cárceles para confrontarlo por haberse llevado unos documentos de su casa. Astarloa se debate entre la posibilidad de que Cárceles haya actuado de mala fe o simplemente haya querido consultar los documentos en su casa. Al llegar a la casa de Cárceles, Astarloa encuentra la puerta cerrada y decide forzarla. Después de varios intentos, logra entrar y descubre el cuerpo de Cárceles atado y torturado en su cama. Astarloa intenta hablar con él, pero Cárceles solo puede emitir gemidos de dolor y terror. Astarloa se da cuenta de que Cárceles lo ha delatado y que los asesinos están tras él. Decide no huir y esperar a que los asesinos vengan a él. Prepara su casa para la llegada de los asesinos y se arma con un revólver y su bastón estoque. Finalmente, Adela de Otero aparece en su casa y le cuenta la historia de cómo fue rescatada por un hombre que se convirtió en su protector y padre adoptivo. Adela le pide a Astarloa que la proteja y él acepta.
Siguiendo este capítulo, Adela de Otero continúa revelando detalles sobre la historia que involucra a don Jaime. Ella le cuenta que el hombre del que han estado hablando era un alto cargo en una importante sociedad y se vio envuelto en un juego político peligroso. Adela explica que él decidió cooperar con Narváez para salvarse del destierro y la ruina. También revela que Luis de Ayala, el marqués, estaba chantajeando a su benefactor con documentos comprometedores y que ella misma se encargó de matarlo. Adela también revela que el marqués había encontrado una carta que implicaba a su benefactor en un asunto político y que ella necesita esa carta para proteger a su amigo. Don Jaime se da cuenta de que tiene la carta y se la muestra a Adela. Ella le explica que la carta contiene información sobre el agente que estaba pasando información sobre las conspiraciones de Prim y que necesita recuperarla. Don Jaime se niega a entregársela y Adela intenta atacarlo con un estoque, pero él logra defenderse y escapar. El capítulo termina con don Jaime enfrentando a Adela en una sala de esgrima.
