1 EXT/DÍA BARCO (1588) 2 EXT-INT/DÍA MUELLE-ALMACÉN OFICINA DE LA ARMADA (1588)

En este capítulo, el grumete avista tierra a través de un catalejo y se ve el puerto de Lisboa. Gil Pérez, preocupado, revisa una lista en el almacén de la Armada y luego se dirige al despacho donde se encuentra con Rocamora. Gil Pérez le muestra una lista y le pregunta si es la definitiva del San Juan, pero Rocamora no entiende. Después, Gil Pérez se dirige al almacén y encuentra un baúl con un ordenador portátil y un escáner. Mientras tanto, Angustias habla con Irene y Ernesto sobre su jubilación y reciben un fax que indica que Lope de Vega no va en el San Juan. Julián recuerda una llamada telefónica que recibió hace tres años y Maite llega tarde al trabajo. En el presente, Julián se debate si llamar o no antes de salir de casa. Maite llega tarde y le pide a Julián que conteste su teléfono. Julián contesta y se encuentra con su yo del pasado. En el despacho, Salvador les informa que Lope de Vega se ha enrolado en la Armada y les envía a Lisboa en 1588 para encontrarlo. Julián, Amelia y Alonso viajan al pasado y se encuentran en un barco. Gil Pérez les explica que están en Lisboa y que deben encontrar a Lope de Vega antes de que zarpe en el San Esteban. Julián encuentra información en internet que indica que el San Esteban encallará en Irlanda y todos los tripulantes morirán. Amelia encuentra a Lope de Vega en una taberna y Julián se enfrenta a él. Alonso descubre que va en el mismo barco que él. Julián sale de la taberna y encuentra a Alonso y al soldado borracho. El soldado confirma que Alonso no es él y habla sobre su futuro. Amelia propone una forma de evitar que Lope vaya en el San Esteban.

22 EXT/DÍA CALLES DE LISBOA (1588)

En este capítulo, Amelia, Alonso y Julián regresan al almacén que sirve de despacho de intendencia de la Armada. Amelia propone un plan para capturar a Alonso y retenerlo en el barco de Gil Pérez hasta que zarpe el San Esteban. Julián y Alonso deciden investigar la identidad del otro Alonso de Entrerríos que parte en el San Esteban. Mientras tanto, Amelia se encuentra con un soldado en el puerto que la acosa, pero es salvada por Lope de Vega. Amelia y Lope tienen una conversación en la que ella le reprocha su actitud y le dice que no necesita que la salve. Julián y Alonso llegan a una taberna en el puerto donde presencian el caos y la violencia entre los soldados. Julián y Alonso deciden hablar con un joven que bebe solo en una mesa, resultando ser el hijo de Alonso de Entrerríos. Julián y Alonso se presentan y hablan con el joven, quien les cuenta que su madre le dijo que su padre murió en batalla. Julián y Alonso deciden llevar al joven al camarote de Gil Pérez para protegerlo. Mientras tanto, Amelia pasea por Lisboa y es acosada por dos soldados, pero es rescatada por Lope de Vega. Julián habla con Gil Pérez y le pregunta qué pasará si Lope no se presenta en el San Esteban, a lo que Gil Pérez responde que le condenarán a muerte. Julián se queda en la fonda mientras Amelia y Alonso van a buscar a Lope. Encuentran a Lope en una situación comprometida con una mujer y Julián interrumpe la escena. Lope se enfada y Julián y Lope pelean, pero finalmente deciden llevar a Lope al camarote de Gil Pérez. Amelia se separa de ellos y se encuentra con unos soldados que la llevan a un callejón, donde es rescatada por Lope. En el camarote de Gil Pérez, Julián y Amelia hablan sobre la situación y Julián se disculpa por su comportamiento. Amelia y Julián deciden ir a buscar a Alonso y lo encuentran en la taberna del puerto. Julián golpea a Alonso para poder llevárselo al camarote de Gil Pérez. En el camarote, Alonso despierta y se entera de que su hijo también está en el barco. Gil Pérez les informa de que deben llevar a Alonso y a su hijo al San Juan, que zarpa al día siguiente. Amelia, Julián y Alonso se despiden de Gil Pérez y regresan al Ministerio. En el Ministerio, Salvador, Irene y Ernesto sospechan que los tres ocultan algo, pero deciden dejarlo pasar. Julián llama a Maite y habla con ella, mientras Amelia lee un libro de Lope de Vega y Alonso se encuentra con un hombre prehistórico en el pasillo. El capítulo termina con Alonso recordando un momento en el futuro en el que le da dinero a su hijo y le pide que se lo dé a su madre.